El carnicero Nelson Alejandro González, de 26 años de edad, pereció diez días después de recibir una golpiza cuando se hallaba en su casa, ubicada en Caigua, parroquia rural del municipio Simón Bolívar.
El cadáver fue trasladado al anfiteatro del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf), ubicado en la urbanización Tronconal III de Barcelona, a fin de que le practicaran la autopsia.
Allí estaban consternados unos parientes, incluida el ama de casa Lisbeth González, quien contó que a las 2:00 de la tarde del pasado 28 de enero, el vecino Franklin Mejías y tres oficiales de la Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui) sacaron a su hermano Nelson de su residencia.
Según indicó la joven, los cuatro hombres se llevaron al carnicero porque Mejías lo sindicó, sin razón, de robarle un alambre de púa. El grupo presuntamente golpeó a Nelson y lo dejó libre después.
Lisbeth agregó que Nelson regresó solo a su residencia y convulsionó por primera vez en su vida. Además tenía fiebre y dolor de cabeza.
Auxilio
El ama de casa María González, junto con otros familiares, llevó a las 3:00 pm del pasado lunes a su primogénito Franklin al hospital universitario Luis Razetti de Barcelona, donde le mandaron a hacer una tomografía que cuesta 150 dólares. Ellos buscaban recursos para pagarla.
Lo remitieron luego al centro asistencial del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss) Domingo Guzmán Lander del sector Las Garzas, donde expiró este jueves.
Los parientes denunciarán el deceso de Nelson Alejandro González ante el Ministerio Público del estado Anzoátegui.
Barcelona / Yraida Núñez
