La Unión Europea (UE) impuso sanciones el lunes a 19 funcionarios de Venezuela acusados de socavar la democracia o de violar derechos humanos en el país sudamericano.
El martes el ente emitió un comunicado para justificar la decisión, que no fue del agrado del gobernante del país sudamericano Nicolás Maduro, al asegurar que busca contribuir a que exista una verdadera democracia en Venezuela.
Los ministros de exteriores de la UE aseguraron que sancionaron a los 19 individuos congelando sus activos y con prohibiciones de viaje “en vista de la situación deteriorante en Venezuela después de las elecciones de diciembre de 2020”. Los principales partidos de la oposición boicotearon dichas elecciones.
Eso significa que un total de 55 funcionarios venezolanos ahora están sujetos a sanciones de la UE.
“Los individuos agregados a la lista son responsables, principalmente, de socavar los derechos electorales de las oposiciones y el funcionamiento democrático de la Asamblea Nacional (AN), y de serias violaciones de derechos humanos y restricciones a libertades fundamentales”, indicaron los ministros.
Medidas
Agregaron que las medidas no están diseñadas para “tener efectos humanitarios adversos o consecuencias involuntarias en la población venezolana y pueden revertirse”.
Alguna vez una rica nación petrolera, Venezuela ahora está hundida en una profunda crisis económica, que los críticos culpan a dos décadas de leyes socialistas fallidas que han dejado al país en la bancarrota y a su infraestructura en mal estado. Maduro dijo que está siendo atacado por Estados Unidos, que quiere expulsarlo del poder.
En Caracas, el gobierno de Maduro rechazó las sanciones y las consideró como “una expresión de su frustración ante el fracaso de su agresión” contra Venezuela.
La reacción de Maduro
“Señalar con falsos argumentos a ciudadanas y ciudadanos honorables como reacción ante la frustración de un grupo de Estados miembros de la Unión Europea (UE) por la manifiesta ineficacia de sus acciones para forzar un cambio de gobierno por la fuerza en Venezuela, no es más que otra torpe decisión cuya única intención apunta a afectar negativamente el diálogo político que se desarrolla en el país”, expresó el gobierno venezolano en un comunicado divulgado por el canciller Jorge Arreaza a través de su cuenta en Twitter.
“Venezuela reitera y denuncia el carácter arbitrario de estas pretendidas sanciones, sin asidero jurídico alguno en las normas compartidas del derecho internacional”, añadió el escrito.
Bruselas / Caracas / AP
