Los vecinos de los sectores 29 de Marzo, Resistencia, Buenos Aires y Cayaurima, en Barcelona, han pasado la cuarentena radical por el Covid-19 sin ver ni una gota de agua en los grifos, por lo cual aseguran que viven una paradoja en este tiempo de pandemia.
José Briceño, residenciado en La Resistencia, dijo que este lunes suman ocho días sin el servicio y que han tenido pocas alternativas para abastecerse, pues el tubo en el que solían conseguir agua tampoco cuenta con suministro.
“Si el servicio de agua fuese óptimo, el acato de la cuarentena sería mayor, pero yo, por ejemplo, debo salir de mi casa a cargarla en carretillas para hacer los oficios del hogar”, comentó Briceño.
Esta situación también acarrea un golpe para el bolsillo de los barceloneses. Así lo aseguró Raquel Quijada, habitante del sector Buenos Aires, pues diariamente deben gastar entre Bs 400 mil y Bs 450 mil para comprar agua potable en botellones recargables de 18 litros.
“Llevo apenas tres días pagando por las recargas y he gastado más de 1 millón 300 mil bolívares; lo hago por la necesidad”, señaló el ama de casa.
Los vecinos solicitan a las autoridades gubernamentales que se autorice la distribución del líquido por cisternas a las comunidades afectadas, dado que se hace cuesta arriba continuar comprando botellones y pagando servicios privados.
Barcelona / Milena Pérez