Comerciantes y empresarios del sector turístico de Araya, en el municipio Cruz Salmerón Acosta del estado Sucre, denunciaron que están siendo objeto de cobros desproporcionados en las tarifas eléctricas por parte de Corpoelec.
Maritza Ramírez, dueña de una posada, relató que esta semana se presentó en varios negocios de la península un supuesto ingeniero de la estatal, quien dijo haber sido enviado de Caracas para el cobro de facturas del servicio "que rayan en la exageración".
Ramírez explicó que los cobros de las deudas van de los 1.000 hasta 30 mil dólares por facturas desde el 2018 hasta la presente fecha.
Agregó que el referido funcionario realizó amenazas de suspender el servicio en negocios y residencias.
“Esto nos parece un atropello porque no nos estamos negando a pagar, pero de dónde sacamos la plata, si aquí lo más que tenemos son deficiencias de luz, quema de equipos que nadie responde por ellos, dos años que tuvieron sin sistema, más los dos años de pandemia”.
Explicó que en Araya la mayoría de los negocios están quebrados “y estamos inventando para sobrevivir y a ellos no les importa. Con problemas graves de agua, luz, cobro excesivo de ordenanzas, sin señal de internet, basura sin recoger y ellos pretenden cobrar unas facturas inventadas”.
La empresaria señaló que muchos negocios están sin medidor, por lo que no hay lecturas, si no que se está calculando al ojo. Además, nadie explica, solo amenazan.
“Nos dan 72 horas. O sea que el lunes si no tenemos los dólares cortarán el servicio sin derecho a nada. Entonces nos quedará cerrar las puertas y pedir auxilio porque para nadie es un secreto que este municipio es muy rico en sal y pesca, pero todo sale y aquí no invierten nada”.
Ramírez precisó que en la actualidad hay nueve posadas, cuatro están alquiladas por el INEA, Dell Aqua, la alcaldía y la Unicef. Mientras que las otras están solas. “Es importante que se haga una revisión e inspección con nuestro municipio”, finalizó.
Sucre / Cecilia Lárez
