La lista de precios de 25 productos que fijó el Gobierno e hizo pública el pasado miércoles 22 de agosto, es escasamente cumplida en el mercado municipal de Puerto La Cruz.
Durante un recorrido que la mañana de este martes realizó el equipo de El Tiempo por las instalaciones, se observó que los pocos comerciantes que expendieron algunos de esos artículos, lo hacían por montos iguales o inferiores, pero por pago en efectivo.
Un litro de aceite comestible era ofrecido en 25 bolívares soberanos, cuando lo oficial es BsS 36. Mientras que el kilo de azúcar estaba en BsS 20 en vez de BsS 32. En cambio el envase de mayonesa de 500 gramos era expendido en BsS 30 y no BsS 31.
También había vendedores que, aparte de no ofrecer los precios justos, seguían condicionando las formas de pago: un monto si es en efectivo y otro si es por vía electrónica. Por lo menos, el kilogramo de sardina fresca era vendido en papel moneda en BsS 4 y por punto de venta en BsS 10, cuando lo publicado en Gaceta Oficial son BsS 17,50.
Con el precio del café molido ocurrió de igual forma. En efectivo era comercializado en BsS 35 y por pago electrónico en BsS 120. Este último monto es el establecido en Gaceta Oficial.
“Esto necesita supervisión constante. Hoy por ejemplo pagué BsS 120 por un cartón de huevos cuando en realidad quedó en BsS 81,50. Hay quienes venden el kilo de carne en BsS 150 y de pollo en BsS 120. La mayoría de los comerciantes tienen sus puestos cerrados porque no quieren vender a esos precios, o si lo hacen, quieren hacerlo por efectivo. Todavía nadie ha cobrado el aumento de salario”, manifestó la pensionada Beltrana Machado.
Sin mercancía
La mayoría de los puestos que expenden carne de res y pollo en el mercado porteño se encuentran cerrados desde el pasado domingo.
Según el carnicero “El Samurái”, se debe a que los proveedores no están trabajando con la misma regularidad y por ello se quedaron sin mercancía. El sábado fue la última vez que fueron surtidos algunos vendedores con seis reses para todos.
“A mí por lo menos me dejaron sólo una, que fueron 300 kilos entre carne y hueso. Todo lo vendí el mismo día al precio justo. Así lo seguiré haciendo siempre y cuando el proveedor la traiga a menos de BsS 50. Ahora vengo a abrir un rato el negocio hasta que nos vuelvan a surtir”.
“El Samurái” les pidió a los mayoristas que se ajusten a las medidas gubernamentales porque, por su parte, confesó que no quiere recibir ganado a elevados costos para trabajar después con temor a que le decomisen la mercancía o le quiten su licencia.
José García fue el único vendedor que ofreció carne de res la mañana de este martes dentro de las instalaciones. Como era poco lo que le quedaba, pedía hasta BsS 80 en efectivo porque no tenía punto.
“El punto de venta no los quitó el banco hace más de cinco meses porque supuestamente tenía problemas con Credicard, pero a mí me parece que lo que tienen es un negocio para venderlo más caro. Cuando tengo suficiente mercancía pasan la tarjeta en otros negocios pero me cobran un porcentaje”.
García aseguró que desde hace dos semanas los proveedores no les llevan mercancía a todos los comerciantes. Se ayuda con la venta de pollos, pero desde hace cinco días tampoco les llega.
De hecho, en sólo dos locales expendieron el ave beneficiada por BsS 75 el kilo, lo oficial. Mientras que los charcuteros sólo ofrecían queso duro en BsS 100 y en BsS 120 los huevos y mortadela, cuyos precios también fueron regulados.
El ama de casa María Rivas sólo pudo llevar para su casa unos huesos de pollo, que por lo menos le servirá para preparar un consomé.
“Esta situación cada vez está más caótica. Vine a ver qué podía comprar con el bono que me llegó y es poco lo que llevo. Los precios están exagerados”.
Puerto La Cruz / Elisa Gómez
