La crisis que vive el sector transporte en el estado Anzoátegui, y en el país en general, no es un tema nuevo.
Desde hace más de cinco años, esta es una realidad que ha estado presente entre los habitantes de la entidad.
Las largas horas de espera en las paradas y las extensas caminatas cuando no hay autobuses se convirtieron en el pan de cada día de muchos usuarios en el área metropolitana desde que empezó la escasez de unidades de transporte.
Entre 2018 y 2020, voceros del sector transporte denunciaron en más de una oportunidad que anteriormente la flota de autobuses, busetas y carros por puesto era de 12 mil vehículos, mientras que para ese entonces ya había bajado más de 10%.
No obstante, en la actualidad la crisis es aún más severa. Al menos así lo manifestó el presidente del Sindicato Único de Trabajadores del Transporte de Anzoátegui (Sutta), Lorenzo Rodríguez, quien aseguró que en estos momentos sólo está trabajando 6% de las unidades que hay en el estado.
"Con la llegada de la pandemia y los problemas de la gasolina, la crisis del transporte se agudizó. Antes de 2015 teníamos 12 mil unidades operativas en el estado y ahorita no llegamos ni a mil", aseveró.
El sindicalista añadió que anteriormente en las rutas más importante de la zona norte, Barcelona-Puerto La Cruz, trabajaban unos 800 vehículos, entre autobuses, busetas y carritos, mientras que "ahorita vemos apenas 50, y medio operativas con cauchos lisos".
"La línea Upaca, una de las que tenían mayor flota en la zona norte, actualmente no cuenta ni con 10 unidades. En Upaca había 150 buses, 80 busetas y 120 carritos. La misma realidad se vive en la Cooperativa Mixta y Casa Fuerte, que antes tenían más de 80 unidades y ahorita sólo tienen 10 cada una", acotó el presidente del Sutta.
Esta realidad no sólo es evidente en rutas largas, sino también en las internas como por ejemplo la del sector Las Delicias, en el municipio Sotillo.
De acuerdo con el testimonio de un conductor que labora en esta línea, quien prefirió no identificarse, en la actualidad hay apenas unas 40 unidades.
Esta es una cifra alarmante, pues según la data del Sutta, en Las Delicias operaban anteriormente 350 unidades de transporte, aproximadamente.
Según el presidente del Sutta, Lorenzo Rodríguez, un carburador que en el mercado tradicional cuesta 60 dólares, es vendido hasta en $10 por los transportistas que desarman poco a poco sus unidades. "Unos cauchos que valen $70 los rematan en $15. Todo lo ponen más barato: el aceite, los arranques, todo hasta que les queda el caparazón del carro", concluyó.
Similar situación se evidencia actualmente en las líneas de Oropeza Castillo y Bello Monte, ambas de Puerto La Cruz.
Nayrobis Sulbarán, quien es socia de la línea de Bello Monte, comentó que desde hace cinco años ha mermado notablemente la cantidad de unidades en esta organización.
"Yo recuerdo que entre la línea de nosotros y la de Oropeza había 239 vehículos entre carritos y autobuses. Mi esposo y yo vendimos uno de los carros que teníamos en la línea porque vimos que ya no era rentable esto del servicio de transporte", acotó.
La crisis que vive el sector ha llevado a más de un transportista a vender sus unidades para invertir el dinero recaudado en otros negocios.
Lamentablemente, expresó el presidente del Sutta, Lorenzo Rodríguez, hay miembros del gremio que simplemente han negociado sus autobuses o carros por puestos para poder comer en medio de la difícil situación económica que se vive en el país.
"Unos han vendido completa la unidad y otros lo han hecho por parte. No es rentable, pero lo hacen para comer rápido. Venden cauchos, discos de frenos, radiadores y carburadores, entre otras cosas", dijo.
Puerto La Cruz / Jesús Bermúdez
