De múltiples disparos fue asesinado Freddy Enrique Reyes, de 50 años, quien era líder sindical y comunitario de la población rural de Melones, en el municipio Guanipa, al sur del estado Anzoátegui.
El suceso ocurrió cerca de las 9:00 de la noche del martes, cuando caminaba junto a su concubina Nairim Josefina Durán, por la calle 6 de la urbanización Nube de Agua de El Tigrito. Al parecer, un sujeto, aún por identificar por las autoridades, los atacó tras esconderse en la maleza.
El individuo interceptó a la pareja, pero, supuestamente, su objetivo era Freddy Reyes, contra quien se ensañó. Le ocasionó al menos 12 heridas producidas por el paso de proyectiles, según reportaron los criminalistas de la policía científica.
Tras consumar el homicidio, el individuo corrió hacia una calle lateral, donde lo aguardaba otro a bordo de una moto. El sitio carece de iluminación, por lo que testigos no pudieron ver a los autores del hecho.
Reyes quedó en el suelo, mientras que Nairim, desesperada, suplicaba que la ayudaran para llevarlo a una clínica, pero no pudo hacer nada, porque ya no tenía signos vitales.
La mujer contó que Reyes, con quien tenía tres años de relación, pasó el día en la casa que compartían y en la tarde decidieron aceptar la invitación del candidato de Nuevo Pacto, Tisón y Unidad Soberana, Efrén Darío Arocha, para acompañarlo a una caminata como parte de su cierre de campaña.
Culminada la jornada, retornaban a su residencia cuando ocurrió el crimen.
Durán afirmó desconocer si su marido había recibido amenazas, aunque sí tenía enemigos “gratuitos” porque desde hacía seis meses se dedicó a gestionar cupos de empleo para los habitantes de Melones y eso le había traído algunos problemas con otros sindicatos petroleros y empresas.
Evelín Gómez, vocera de Campo Melones, señaló que aunque en la actualidad los taladros están parados, Freddy Reyes se la pasaba allá, debido a que tenía un fundo y siempre estaba pendiente de lo que allí acontecía.
Comentó que la última vez que lo vio con vida fue el pasado lunes, cuando la visitó para conversar sobre situaciones que estaba atravesando, tomó café y comió un trozo de casabe, luego se fue.
Al día siguiente, unos delincuentes se metieron en la casa de Evelín, a fin de robarle la comida y llamó al celular a Reyes para contarle. Éste se comprometió a ir para ayudarla a resolver.
“Freddy, que era como un hijo, me dijo que lo esperara, que antes de las 11:00 de la noche estaría en mi casa, pero jamás pensé que recibiría la trágica noticia de que lo habían matado”.
Agregó que hace unos meses, el líder comunitario se sentía atormentado, pensativo y preocupado, suponía que alguien lo amenazaba, pero no dijo nada. Señaló que el estrés lo canalizaba cabalgando en su caballo por la sabana.
La venganza
Funcionarios del Cicpc, subdelegación El Tigre, abrieron las averiguaciones, recolectaron y procesan las evidencias e interrogan a testigos referenciales, entorno familiar y amigos para determinar el móvil, cobrando fuerza la venganza bajo la modalidad del sicariato en la vía pública.
El Tigre / Sol Vargas García
