Desoladas y con poco tráfico. Así amanecieron las principales ciudades del oriente del país, luego de las elecciones presidenciales de este domingo 28 de Julio, en las cuales el Consejo Nacional Electoral (CNE) le otorgó el triunfo al candidato Nicolás Maduro, actual mandatario nacional y quien buscaba la reelección.
En Puerto La Cruz, Barcelona, El Tigre, Anaco, Píritu y Puerto Píritu, todas éstas en Anzoátegui; así como en Cumaná y Carúpano (estado Sucre); y en Maturín, capital de Monagas, el panorama era el mismo: la mayoría de los comercios cerrados, poco tráfico vehicular y una sensación de soledad que los transeúntes no sabían cómo describir.
Para el taxista Gustavo Guache, quien presta servicio en Píritu y Puerto Píritu (zona oeste de Anzoátegui), la realidad de hoy era de esperarse. Aseguró que salió a trabajar por necesidad "aunque solo he hecho una carrerita desde las 8:00 de la mañana. Ayer nos robaron. Cómo se puede sentir una nación cuando le quitan lo más preciado, me robaron mi voto y el de más de 7 millones de venezolanos. El mayor descaro de la historia de este país", dijo.
En Barcelona el ambiente era de desolación. Sus sitios y avenidas más concurridas, entre ellos la plaza Libertadores y el bulevar 5 de Julio; así como las avenidas Fuerzas Armadas, Rolando y Pedro María Freites estaban con los comercios cerrados y una cantidad mínima de personas transitando.
En el sector Tronconal 3 de Barcelona, uno de los más populares de la capital del estado Anzoátegui, el panorama era similar con negocios cerrados, solamente los comercios de dueños de origen asiático eran los que permanecían abiertos. Y en las calles aún se veía rastro de lo que parecía haber sido una quema de cauchos realizada la noche de este domingo.
En Puerto La Cruz, su mercado, que es el principal del estado y sitio habitual de mucho movimiento comercial, este lunes estaba prácticamente cerrado. Apenas uno que otro puesto abrió sus puertas para recibir a una casi inexistente clientela.
En Anaco y El Tigre, tampoco era distinto el panorama. En la ciudad gasífera, avenidas como la Mérida y la Aeropuerto, habitualmente congestionadas por el flujo de carros y personas, hoy estaba prácticamente vacía.
Donde sí medio funcionó el mercado con cierta normalidad fue en Carúpano, ubicada en el estado Sucre, al Este de la capital Cumaná. Allí los comercios abrieron sus puertas y la actividad parecía más la habitual.
En esta misma urbe se pudo observar que algunas oficinas gubernamentales, como por ejemplo la alcaldía, no trabajaron, mientras que otras permanecían abiertas pero en una especie de feriado no oficial. Al mismo tiempo, patrullas motorizadas de la Guardia Nacional Bolivariana recorrían la ciudad.
En Cumaná todo amaneció cerrado y el movimiento comercial no mejoraba con el paso de las horas matutinas. Al mediodía, la desolación seguía siendo la norma.
En Maturín una madrugadora lluvia hizo que el panorama desolador fuese aún más marcado y la actividad comercial aún más reducida.
Al parecer, el Oriente del país aún sigue en una especie de limbo, esperando por claridad en el panorama nacional y por una normalidad que parece reacia a volver.
Puerto La Cruz / Redacción web
