El pasado 7 de julio, el mundo se conmovió ante el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse. Un mes después, los haitianos se mantienen a la expectativa y en la incertidumbre al no saber quién mató al mandatario de 53 años, pese a las detenciones, investigaciones, registros y demás acciones llevadas a cabo para esclarecer el suceso.
Era alrededor de las 1 de la mañana cuando un grupo de 26 individuos no identificados asaltó la residencia privada del jefe de Estado, ubicada en el barrio Pétion-Ville de Puerto Príncipe, y lo tirotearon. Durante el hecho también resultó herida su esposa, Martine Moïse, quien tuvo que ser trasladada de emergencia a Miami, Estados Unidos (EE.UU.), para ser atendida.
“Cuando se fueron, creyeron que estaba muerta”, dijo la exprimera dama en una entrevista concedida al New York Times (NYT), durante la cual relató el drama que vivió. Además, describió como un “dolor ardiente” el haber sido testigo directo del asesinato del hombre con el que compartió 25 años de su vida.
En unas primeras declaraciones, el primer ministro interino Claude Joseph, quien en ese momento había tomado el mando de la nación caribeña y pidió a los ciudadanos mantener la calma, informó que Moïse fue ultimado por personas que hablaban inglés y español, en un acto que calificó como “inhumano, bárbaro y atroz".
No obstante, las incógnitas judiciales se han hecho sentir. El desconocimiento sobre un tema de interés público es cada vez mayor y deja más dudas que aclaratorias, debido a la inexistencia de pistas claras sobre los patrocinadores del homicidio y cuáles fueron los motivos que los movieron.
Datos
De acuerdo con la agencia de noticias EFE, citando datos ofrecidos por la policía, al menos 44 personas han sido detenidas, entre ellas 12 funcionarios de seguridad. A algunas se les atribuye cierta responsabilidad por el magnicidio, mientras que a otras se les involucra directamente.
El medio de comunicación indica que entre los privados de libertad figuran 18 colombianos y seis haitianos, de los cuales tres son nacionalizados estadounidenses. Según ha dicho el gobierno haitiano, esta ejecución “constituye un crimen internacional por la presunción de la participación de ciudadanos extranjeros en la planificación, financiación e implementación del ataque”.
Por tal razón, Haití considera necesario que, en conjunto con los órganos nacionales, la comunidad internacional también apoye en las averiguaciones, lo que llevó a la cancillería a solicitar la colaboración de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Comunidad del Caribe (Caricom).
“En nombre de la solidaridad caribeña, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de Haití también solicita el apoyo de Comunidad del Caribe (Caricom), a su solicitud mediante otra carta dirigida al Honorable Gaston Browne, presidente de la Conferencia de jefes de Estado y de Gobierno”, detalla un comunicado.
Pero no sólo eso, la nación caribeña exige, además, la creación de un tribunal especial que permita juzgar a los presuntos responsables, tal como aconteció en Líbano el 14 de febrero del año 2005, con un ataque terrorista que acabó con la vida de al menos 22 personas y dejó decenas de heridos.
Más detalles
Las investigaciones continúan en proceso, pero sin nada definido. El nombre de Christian Emmanuel Sano, un médico de 63 años residenciado en Florida, suena como el presunto autor intelectual del asesinato de Moïse. Al profesional de la salud se le acusa de contratar a mercenarios para acabar con la vida del presidente y hacerse del poder
Sano fue arrestado en la ciudad de Florida. Sin embargo, reseñado por EFE, su abogado Stanley Gaston aseguró que "el proceso judicial se compone de violaciones a los derechos de las personas", al producirse detenciones "sin que haya habido ningún delito flagrante".
Las dudas siguen apoderándose del escenario, pues, pese a la detención del profesional de la salud, el actual primer ministro Ariel Henry, nombrado el pasado 20 de julio, y la viuda del mandatario, afirmaron ante la prensa internacional que los responsables del magnicidio aún no han sido detenidos.
Opinión
Citada por el NYT, Martine comentó que la identidad de las personas involucradas en el asesinato de su esposo aún no ha sido revelada, aun cuando ha habido una cantidad de detenciones. Aunado a eso, se han llevado a cabo pesquisas, interrogatorios e incautación de armas y municiones sin una información precisa sobre los resultados finales de las experticias.
Asimismo, tanto funcionarios del gobierno como de la sociedad civil dudan de los que actualmente han sido capturados por las autoridades, debido a que las personas nombradas, a su juicio, no contarían con los recursos suficientes para ejecutar el homicidio. Consideran que alguien con “más poder” aportó las ideas y el dinero.
Entre las incógnitas que tiene la esposa del presidente muerto tiene que ver con los, al menos, 50 hombres que custodiaban el lugar donde vivían. Ninguno murió ni resultó herido. “No comprendo cómo es que a nadie le dispararon”, dijo.
Cabe señalar que el gobierno de Moïse se tambaleaba en medio de una crisis política, por supuestamente pretender quedarse más tiempo en el cargo habiendo cumplido ya su mandato. El NYT asegura que el mandatario mantenía una batalla contra oligarcas adinerados, por lo que Martine afirma: “Solo los oligarcas y el sistema podían matarlo”.
Puerto La Cruz / Redacción Mundo