En esta época de pandemia por Covid-19, cuando el internet se ha convertido en la herramienta de comunicación más importante en el desarrollo de las actividades laborales y académicas desde casa, la señal es cada vez más deficiente, sobre todo la distribuida por la operadora tradicional.
Y es que de acuerdo con lo dicho por anzoatiguenses consultados por El Tiempo, la conexión de Acceso a Banda Ancha (ABA) de la Compañía Anónima Nacional Teléfonos de Venezuela (Cantv), empresa pionera en el país, ha estado intermitente y, en algunos casos hasta ausente, en la mayoría de las zonas residenciales.
Pese a la baja calidad, la estatal continúa emitiendo las facturas que de no ser canceladas en un lapso prudencial, implicaría el corte del enlace.
Por lo menos, José Marín comentó que debe pagar más de tres millones de bolívares al mes, por el plan de 1 Megabyte por segundo (Mbps) y lleva más de dos semanas sin el servicio, en el sector 29 de marzo de Barcelona.
De hecho, en la actualización de datos que, en junio pasado, realizó el Observatorio Venezolano de Servicios Públicos (OVSP) a través de un estudio de percepción ciudadana en 12 ciudades, se observó que del 36,5% de los encuestados que tenían red en su hogar, más de la mitad opinaba de forma negativa, principalmente por la caída constante de la conexión, mientras que el resto se quejó por la lentitud de la navegación. Sólo en Barcelona, 45,6% de los usuarios catalogaron de malo el servicio.
Ante las fallas, el internet por antena o enlace se ha convertido en la alternativa para muchísimas personas, aunque represente un golpe duro al bolsillo por sus elevados precios, ya que la cotización es en dólares estadounidenses.
En la zona metropolitana operan más de cinco empresas que se encargan de ofrecer el servicio de comunicación. Aunque el equipo reporteril no pudo conseguir una entrevista con algunos de los representantes, se conoció por medio de sus redes sociales que la instalación básica cuesta desde $200.
En cuanto a los planes mensuales con conexión ilimitada, van desde $16 por 2mbps, dependiendo de la compañía de telecomunicación, pues por esta velocidad se puede cancelar hasta $25.
La barcelonesa Mercedes Castillo manifestó que contratar estos servicios fue la opción más factible para ella y su hermana, que por la pandemia requerían trabajar desde casa.
La señal de Cantv había desaparecido a principios de año de la urbanización Brisas del Mar, por lo que les tocó conectarse a un dispositivo de wifi portátil, cuyo consumo les parecía excesivamente caro: casi $40, al ser trasladado a la moneda estadounidense.
“Empezamos a buscar alternativas de empresas. Contacté a tres, pero como era el inicio de la pandemia, muchos recogieron a sus trabajadores por medidas de prevención, hasta que en junio pude contratar una”.
No hay para todas las zonas
Rosa Velásquez, habitante del sector El Viñedo de Barcelona, se quejó porque el servicio de internet por antena no está disponible para esa comunidad.
"Contacté a varias empresas, incluso hay una que dice que llega a todos lados, pero resulta que para mí zona no llega. Sería un gran sacrificio contratar ese servicio, pero lo requiero con urgencia porque es una herramienta de trabajo”, resaltó Velásquez.
Sin embargo, para Castillo no fue un servicio fácil, pues tras un estudio de factibilidad de señal se dieron cuenta de que desde su casa tenía caída la conexión con el nodo (enlace emisor) más cercano, por lo que tuvo que conversar con otros vecinos, quienes también estaban interesados en la contratación, para colocar la antena en una de las casas que tuviera mejor señal.
“En ese momento cancelé más de $300 por la instalación, porque como la antena iba a quedar en otro lugar debía pagar por varios metros de cable para que llegara hasta mi casa. Empecé por el plan más barato que era 2mb y la señal era perfecta, me habían garantizado el 70% de efectividad, pero poco a poco la calidad ha disminuido”, expresó Castillo.
Barcelona / Elisa Gómez
