El Gran Premio de Emilia-Romagna, de la Fórmula 1, que estaba pautado para el 21 de mayo, fue suspendido a consecuencia de la emergencia climática que se vive en la zona norte de Italia.
El propósito de esta medida es evitar la sobrecarga de los equipos de emergencia, que en las últimas horas se reportaron al límite. Los rescatistas buscaban atender las consecuencias de los ríos de lodo que se registraron en la región.
“Es una gran tragedia ver lo que le sucedió a Imola y Emilia-Romagna, la ciudad y la región en la que crecí y mis pensamientos y oraciones están con las víctimas de las inundaciones y las familias y comunidades afectadas”, dijo el presidente de F1, Stefano Domenicali.
Pilotos como Lewis Hamilton y Max Verstappen respaldaron la decisión, que busca proteger la integridad de los asistentes a la jornada.
Roma / Redacción web
