España, liderada por los 19 pts de Santi Aldama, derrotó a Grecia este martes por 84-77 en la segunda jornada del baloncesto olímpico masculino, en la que las 27 unidades de Giannis Antetokoumpo quedaron para la estadística de los libros de París 2024.
Con esta victoria, España, que esta vez sí ganó la batalla por el rebote (39-31), y que jugará su tercer partido el viernes, contra Canadá, de nuevo en el estadio Pierre Mauroy de Villeneuve-d’Ascq, en las afueras de Lille, mantiene vivas sus esperanzas de estar en las eliminatorias del campeonato, que, a partir de cuartos, se resolverán en París.
Ambos equipos, que habían perdido su primer partido, jugaban por la supervivencia en el torneo olímpico, en el que una nueva derrota comenzaría a indicar peligrosamente el camino hacia la frontera francesa.
Aldama, autor de diez de los doce primeros puntos españoles, no evitaba el primer despegue griego (12-20), pero la entrada de los veteranos, Rudy Fernández -en sus sextos Juegos y que marcó diez puntos en su partido 265 como internacional- y, sobre todo, Llull, segundo capitán, que enseguida arrancó su maquinaria anotadora, aportaron serenidad a España.
Y con cuatro asistencias de Lorenzo Brown, la ‘Familia’ se acercaba a los 21-22 con los que se cerró el primer cuarto.
Los hombres de Sergio Scariolo, bien en defensa, se fueron estirando gracias al tiro exterior, con un segundo cuarto impresionante. Un triple de Llull daba su primera ventaja del partido a España (24-22), que, con otro de Rudy y otro más de un esta vez mucho más afinado Lorenzo (36-29), iban ampliando la ventaja.
Lo que fallaban los griegos lo anotaban los españoles (11 de 17 triples en la primera mitad). Pradilla, Abrines y Brizuela elevaban el juego coral; y un triple de este último daba la máxima ventaja española, de catorce puntos (46-32).
Antetokoumpo no anotó ni un solo punto en el segundo cuarto -parcial de 28 a 13 favorable a España- y se fue a la caseta con nueve tras otro intercambio de canastas de tres entre Papanikolaou y de Abrines, que mantenía la ventaja española al descanso (49-35).
Willy aumentaba a dieciséis en el arranque de la reanudación, pero España se atascaba. Sin un referente claro en ataque, dos triples de Walkup y de Papanikolaou y un mate de Anteto acercaban de nuevo a los hombres de Vasilis Spanoulis (55-47).
Santi Aldama se confirmaba como la gran revelación hispana del torneo y, con un nuevo triple, el ala-pivot de los Grizzlies aportaba una tranquilidad que se desvaneció a partir de ahí con un parcial de 0-7 que dejaba a los griegos a sólo seis puntos.
Con 62-56 arrancó el acto decisivo, en el que Antetokoumpo confirmó con cinco puntos seguidos que estaba despierto. Rudy y Juancho Hernangómez intentaban taponar el desagüe en unos momentos en los que Toliopoulos suministraba veneno en forma de un 4 de 4 en triples que volvía a poner a Grecia a un solo punto (68-67).
Volvió la grandeza de Rudy, pero los griegos no querían morir, y la estrella de los Milwaukee Bucks -que acabó con la mayor valoración del partido (32)- se echaba el equipo a sus espaldas, igualando a 71 a falta de cuatro minutos y medio.
En el tramo final Brown se acercó a ratos al ‘Don Lorenzo’ del último Europeo; Sergio Llull demostró que, a los 36 años, tiene mecha para rato; y Aldama dejó claro que está llamado a ser el líder de este equipo de aquí a sólo un par de años.
Papanikolaou volvía a asustar, Willy convirtió en oro su rebote, pero ‘Anteto’ era un león herido, elevando su cuenta anotadora a 27 para poner a Hellas a solo tres puntos. La réplica de Giannis tras una fallida posesión hispana desde la línea de tres fue infructuosa; y España, que remató en dos acciones de Willy y de Alberto Díaz, demostró que aún sigue muy viva.
Lille / EFE