Un lote de armas blancas y de fuego, así como droga, decomisaron comisiones civiles y militares durante una requisa realizada este domingo, entre las 6:00 am y 5:30 pm, en el retén de la Comandancia de la Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui), ubicada en el Crucero de Lechería.
La revisión se efectuó tres días después de que el interno Deyvis Rowison Borges Moly, de 24 años de edad, pereciera en el hospital universitario Luis Razetti de Barcelona, a donde fue trasladado luego de ser golpeado por compañeros de celda.
El director de esa institución, general (GNB) Félix Manrique Carreño, mencionó que una junta interventora ya tenía previsto hacer una inspección en los calabozos, ya que este tipo de procedimiento no se hacía allí desde hacía unos cinco años. Actuaron para garantizar el régimen interno, de acuerdo con lo dispuesto por el Ministerio del Poder Popular para el Servicio Penitenciario (Mppsp).
68 efectivos de la Zona 52 de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y 31 funcionarios de Polianzoátegui participaron en la requisa, en presencia del titular de la Defensoría del Pueblo en la entidad, Rafael Vega, y del fiscal penitenciario Kenny Hurtado.
Manrique indicó que en el reclusorio, las comisiones hurgaron entre las paredes, cañerías y colchones, lugares en los cuales hallaron dos revólveres, una escopeta, cinco cartuchos calibre 12 y un proyectil de 38 mm. Además, 32 cuchillos, 27 machetes, tres objetos punzantes y siete tubos.
También decomisaron 66 envoltorios de presunta marihuana, una balanza y cuatro pipas; al igual que 14 teléfonos celulares.
Traslado de pranes
El general Félix Manrique señaló que los tres líderes negativos del retén de Lechería fueron trasladados a otros calabozos. Precisó que a “el neno” Ruiz Carett (31), procesado por homicidio, lo llevaron a las celdas del Centro de Coordinación Policial (CCP) del barrio El Viñedo de Barcelona.
A los otros dos pranes, cuyos nombres no fueron suministrados, los ingresaron en el CCP de Puerto La Cruz y Anaco.
Manrique expresó que durante el operativo verificaron, a su vez, el estado de salud de todos los detenidos: 119 hombres en el retén, más 38 en el área externa, así como 25 mujeres.
El jefe militar dijo que hacen diligencias para que un reo que sufre de tuberculosis y otros tres que tienen la piel amarilla reciban atención médica en los Centros de Diagnóstico Integral (CDI) de la Misión Barrio Adentro y Distrito Sanitario de Anzoátegui.
Manrique manifestó que también tomarán medidas para que los tribunales agilicen los procesos judiciales de estas personas.
Al ser consultado, Rafael Vega informó que durante la jornada efectuada en los calabozos de Polianzoátegui, la Defensoría del Pueblo estuvo pendiente de que se respetaran los derechos de los presos. “Todo estuvo legal”.
Vega aseguró que está aseado el reclusorio y que allí no hay hacinamiento, a diferencia de las celdas de la Policía Municipal de Sotillo (Polisotillo) en Puerto La Cruz y Policía Municipal de Bolívar (Polibolívar) en Barcelona.
El funcionario refirió que cuatro o cinco privados de libertad se encuentran enfermos y que unos 20 hombres y diez mujeres aseveraron que desde hace tiempo no los trasladan a los juzgados.
El Poder Ciudadano designó a la defensora Auribel Vizcaíno para que se encargue de que los reclusos con enfermedades sean llevados a los hospitales. Asimismo para que se agilicen las causas con retardo procesal.
Barcelona / Yraida Núñez
