Un grupo de trabajo de 12 países acusó este viernes en la Organización de los Estados Americanos (OEA) a Nicaragua de no mostrar disposición para permitir un diálogo nacional o un cese de la represión de las protestas que comenzaron hace seis meses.
“Los informes de detención y victimización están en aumento, al igual que los actos continuos de represión e intimidación”, indicó el segundo reporte del grupo leído por el embajador chileno Hernán Salinas durante una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA. “La cooperación del gobierno con actores internacionales y regionales relevantes se ha deteriorado considerablemente”.
El grupo, conformado por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos, Guyana, México, Panamá y Perú, había presentado un panorama similar cuando emitió su primer informe el mes pasado.
El embajador alterno de Nicaragua, Luis Alvarado, reiteró la postura de su gobierno de desconocer al grupo y cualquier medida emanada de su existencia.
“No reconoceremos resoluciones ni decisiones adoptadas en un Consejo Permanente injerencista como éste por no contar con la anuencia de nuestro país”, indicó minutos antes de recibir el apoyo de Venezuela, San Vicente y las Granadinas.
Washington / AP