La Corte Suprema de Estados Unidos rechazó este lunes la solicitud del gobierno del presidente Donald Trump para intervenir en la controversia sobre las protecciones para cientos de miles de jóvenes inmigrantes que viven en el país de forma ilegal.
Los magistrados se negaron a aceptar una apelación del gobierno a la orden de una corte menor que requiere que la administración siga aceptando las solicitudes de renovación para el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA por sus siglas en inglés). Lo que hacía a la apelación algo inusual era que el gobierno buscaba sortear al tribunal federal de apelaciones en San Francisco y dirigirse directamente a la Corte Suprema.
En un breve comunicado, los magistrados indicaron que “el tribunal de apelaciones procederá sin demora para decidir sobre este caso”.
Un juez en Nueva York falló a favor de los inmigrantes que impugnaron el fin del DACA y se espera que su caso proceda en un tribunal federal de apelaciones de Nueva York.
El presidente Trump fijó el fin del programa DACA para el 5 de marzo. El fallo de la corte señaló que las renovaciones deben de aceptarse de forma indefinida. El DACA ha proporcionado protección al proceso de deportación y permisos de trabajo a cerca de 800.000 jóvenes inmigrantes, de los cuales muchos fueron traídos a Estados Unidos de forma ilegal cuando eran niños.
No está claro cómo la acción de la corte afectará las labores en el Congreso para presentar una enmienda legislativa. Recientemente, el Senado no consiguió aprobar una iniciativa de inmigración.
La Corte Suprema raramente escucha un caso antes de que un tribunal de apelaciones menor lo haya considerado. La disputa sobre si el presidente Richard Nixon debió de haber entregado las cintas de Watergate es un claro ejemplo.
Nueva York / AP