Algunos trabajadores de comercios y empresas de la capital del estado Anzoátegui mencionaron que están trabajando a medias, tras el incendio en la subestación Barcelona, que mantiene a cinco circuitos sin el servicio eléctrico.
En el caso del bulevar 5 de Julio, los pocos locales que tienen planta eléctrica destinan la energía para la iluminación y la caja, atendiendo al público en un cálido ambiente.
"Nuestra planta es sólo para los bombillos. Las ventas han bajado mucho porque los clientes entran, se sofocan y se van", expresó Eudrín Irobo, trabajador de una tienda de variedades.
Similar opinión compartió Andreína Paruta, quien señaló que pocas personas se atreven, por ejemplo, a probarse un pantalón porque salen sudadas del probador.
"Es poco lo que se ha logrado vender, por lo menos en la mañana de hoy tuvimos tres compradores, cuando en un día normal son más de 10. Eso ha influido en que cerremos a eso de las 4:00 pm y no a las 6:30 pm como de costumbre", comentó Paruta.
El presidente de la Federación de Cámaras y Empresas de Venezuela (Fedeindustria) en Anzoátegui, Héctor Morales, manifestó que aunque algunas fábricas de la 65 que hacen vida en la zona industrial Los Montones tienen generadores eléctricos, trabajan a medias, porque estos equipos no son para tenerlos funcionando tanto tiempo, sino que son para emergencias.
"La producción en la industria se ve paralizada 80%, porque son máquinas que tampoco funcionan con cualquier generador. Es difícil arrancar motores de 60 hp, 40 hp, líneas de producción que necesitan una estabilidad de suministro eléctrico", manifestó.
Sin embargo, Morales reconoció que la afectación eléctrica es un tema fortuito y ha estado en contacto con las autoridades correspondientes, quienes les han hecho saber el esfuerzo que hacen para restablecer el servicio.
Barcelona / Elisa Gómez
