Integrantes de la Asociación Bolivariana de Pequeños y Medianos Comerciantes del Estado Anzoátegui llevan varios años esperando la concesión de un permiso para poder trabajar en el inconcluso Centro Comercial (CC) para la economía informal “La Nueva Jerusalén”.
Sin embargo, esto no ha sido posible, según los vendedores, por “trabas” que les han colocado las autoridades municipales en reiteradas ocasiones.
Leidy de Márquez, comerciante del boulevard 5 de Julio, asegura que “una vez que salió (Guillermo) Martínez de la alcaldía la obra quedó paralizada y hasta los momentos no se le ha dado continuidad”. Cabe destacar que el proyecto comercial inició bajo la gestión del exmandatario local.
Márquez y otros compañeros, por ahora, laboran en un pequeño mercado improvisado al frente de la construcción del reciento, esperando que sea concluido el centro comercial.
Aníbal Márquez, presidente de la organización, denunció que a principios de año, la constituyentista María Leonet se acercó al lugar para evaluar la situación, no obstante, “la edil ha tomado una actitud agresiva y ha demostrado intenciones de querer apoderarse del lugar”.
El ciudadano Jorge Fuentes aseveró que le lesionaron la nariz el pasado mes de agosto producto de golpes propiciados por personas afectas a Leonet.
La vendedora informal Esperanza Jansosuy, de origen indígena, comentó que lleva 45 años trabajando en el centro de la capital anzoatiguense, pero en los últimos tiempos se ha visto afectada por “constantes hostigamientos” de los cuerpos policiales, que “coartan” su trabajo y el de sus compañeros.
Jansosuy asegura que “todos los días decomisan mercancía y meten presa a gente inocente y trabajadora”.
La Asociación exige le sea respetado su derecho a laborar y que el alcalde Luis Marcano y el presidente Maduro se aboquen a dar una pronta solución a la situación que los aqueja.
Barcelona / Andrea Aroca
