Con huecos, maleza y carente de iluminación. Así se encuentra la avenida Raúl Leoní que conduce hacia la zona industrial Los Montones de Barcelona y a comunidades rurales como El Eneal, Mayorquín III, Pica del Neverí y Naricual.
Además, en algunos puntos se observan botes de aguas negras, de los cuales uno de los más grandes es el que se encuentra frente al Mercado de Campesinos y que mantiene anegada parte de la carretera.
Habitantes y comerciantes de los alrededores aseguraron que el problema data de hace unos cinco años y que hasta los momentos, no se le ha dado una solución concreta.
“La semana pasada vinieron a remover el sedimento que se concentra en el medio de la vía, pero no se lo llevaron, simplemente lo depositaron a un costado (…) Eso no debe ser así, con los días eso se va a volver a regar”, dijo uno de los vendedores que se ubica al frente del charco, justo en la parada del sistema Bus de Tránsito Rápido (BTR), y que prefirió reservar su nombre.
Resaltó que tanto él como los otros expendedores que allí laboran se ven afectados por los olores putrefactos.
“Yo, particularmente, sufro de sinusitis. He tenido que volver a echarme gotas en la nariz para controlar el malestar que por el hedor y la tierra se me ha agudizado”, acotó.
Por su parte, José Rodríguez, trabajador del Mercado de Campesinos, señaló que “hace mucho tiempo se llevaron las bombas de succión que aliviaban ese drenaje, pero no las volvieron a traer más nunca”.
“En las noches, quienes transitan por esta vía deben encomendarse mucho a Dios, no sólo por los huecos que no se logran ver por la falta de luminarias, sino también por la inseguridad”, dijo.
Rodríguez mencionó que a pesar de ser evidente el deterioro de la carretera y una zona donde funcionan varias empresas, así como el expendio de alimentos, ni la Alcaldía de Barcelona ni la Gobernación han llevado a cabo trabajos de rehabilitación.
“Ojalá se preocupen por recuperarla pronto, porque de verdad que es muy necesario. Capaz con los arreglos, la gente se anima a venir más al mercado y así recuperaría la vida que tenía antes, lo cual nos ayudaría a nosotros a levantarnos económicamente”, agregó.
Barcelona / Andrea Aroca
