Los ciudadanos que habitan en distintos sectores del municipio Bruzual, estado Anzoátegui, se sienten olvidados por las autoridades porque desde hace dos meses no reciben agua por tuberías, debido a que la máquina de bombeo del acueducto Mayares-Guanape se averió.
Amanda Chacín, una de las afectadas y quien vive en la zona Oeste de la entidad oriental, afirmó que el motor de la bomba dejó de funcionar, sin alguna razón, y las autoridades gubernamentales fueron informadas sobre el problema, pero nunca ordenaron iniciar las reparaciones.
"Esta sequía nos afecta bastante. Pienso que el gobierno y la empresa Hidrocaribe (Hidrológica del Caribe) deben buscar soluciones, porque la gente que vive en los sectores Mayares, Calle nueva, Calle Santa Rosa, Calle Comercio y Candelaria, Inavi y Guamachito, El Motor y Barrio Obrero estamos pasando penurias", señaló la dama, visiblemente preocupada.
William Medina, otro residente de Bruzual, se quejó porque la falla generó que las personas tengan gastos más elevados en cada mes, pues requieren de agua para realizar sus principales tareas como cocinar, limpiar y bañarse.
Aseveró que los ciudadanos invierten grandes sumas de dinero en la adquisición del recurso hídrico, pero la cantidad que reciben es insuficiente para cubrir sus necesidades.
"Pagarle a un dueño de camión cisterna por agua es muy difícil porque nos cobran altas sumas de dinero. En un país como Venezuela, que atraviesa una crisis, es complicado conseguir recursos para comprar agua. Por eso, necesitamos que el gobierno nos ayude a solucionar este gran problema", comentó el caballero que indicó que 800 familias padecen los estragos de la falta de líquido en Bruzual.
Clarines / Joseph Ñambre
