La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU), Michelle Bachelet, expresó preocupación por el abuso de los derechos humanos por parte de fuerzas de seguridad y colectivos armados, así como torturas, asesinatos e intimidación en Venezuela.
Bechelet indicó que su oficina documentó numerosas violaciones a los derechos humanos tales como uso excesivo de la fuerza, homicidios, detenciones arbitrarias, malos tratos bajo custodia, torturas e intimidaciones cometidos por las fuerzas de seguridad y grupos armados progubernamentales, conocidos como "colectivos", durante la última ola de protestas antigubernamentales que se dio en los dos primeros meses del año.
“Durante el auge de las protestas en el 2019 documentamos numerosas violaciones y abusos de derechos humanos perpetrados por las fuerzas de seguridad y los colectivos armados”.
De igual forma rechazó la restricción a la libertad de expresión y prensa, así como también las alegaciones de las autoridades para acusar y maltratar a los profesionales de la comunicación.
“Me inquieta el aumento de las restricciones a la libertad de expresión y prensa en Venezuela y las alegaciones que las autoridades han usado arbitrariamente contra el odio para imputar a periodistas y dirigentes de la oposición y a cualquiera que exprese sus opiniones”.
En su informe Bachelet indicó que el alcance y la gravedad de las crisis en los alimentos, la atención a la salud y los servicios básicos "no han sido plenamente reconocidos por las autoridades", por lo que las medidas que han adoptado han sido "insuficientes".
Señaló que Venezuela enfrentó hace dos semanas un apagón nacional de cuatro días, que según la alta comisionada ha “exacerbado” la situación reduciendo aún más el acceso de las personas a los alimentos, el agua y los medicamentos, y ha afectado gravemente a los hospitales.
Como muestra del deterioro de las condiciones de vida de la población, Bachelet citó una encuesta reciente que reveló que más de un millón de niños ya no asisten a la escuela, principalmente debido al hecho de que los padres no pueden darles el desayuno, al fracaso de los programas de alimentación de las escuelas y a la falta de transporte público asequible.
Asimismo, refirió que el deterioro del sistema de salud ha generado un impacto muy significativo en la mortalidad y morbilidad materna y en la mortalidad infantil, así como la propagación de enfermedades infecciosas que anteriormente estaban bajo control.
Tal pronunciamiento coincide con la visita que realizó una misión técnica de la organización el 11 de marzo para elaborar un informe que sirva de base para un posible viaje de Bachelet a Venezuela.
Puerto La Cruz / Redacción web