Trabajadores y encargados de panaderías ubicadas en el casco central de Puerto La Cruz afirman que suelen tener mejores ventas durante las semanas de cuarentena radical.
“En los períodos de confinamiento más estricto, el movimiento sube bastante, todo lo contrario a cuando hay flexibilización”, aseguró Víctor Maraima, gerente de un expendio de panes situado en la avenida 5 de Julio de la ciudad porteña.
Y aunque reconoció que es algo atípico para el comercio en general, dijo que esta situación se debe a que en las semanas radicales las personas cuentan con un abanico de opciones un poco más reducido en cuanto a la comida ya preparada o que no necesita mucha dedicación.
Griselda Cabeza, empleada de una de las panaderías ubicadas en la calle Sucre, coincidió con Maraima en cuanto a los días que tienen más actividad, aunque lo atribuyó a una causa diferente.
“Los días de cuarentena, la gente se los toma como libres y tienen más tiempo de salir a comprar pan y hacer otras actividades que no pueden realizar cuando están trabajando”, expresó.
En cuanto a las múltiples promociones de cierta cantidad de productos a cambio de un dólar en efectivo, Maraima señaló que entiende a los clientes que se decantan por quienes les ofrecen mayor cantidad, aunque esto signifique una merma en la calidad de lo que compran.
“Normalmente quien da más es porque no utiliza los mejores ingredientes del mercado o simplemente no los coloca completos”, explicó.
No obstante, admitió que esta modalidad ha aportado bastante a los niveles de venta.
Puerto La Cruz / Javier A. Guaipo
