Residentes de diferentes sectores de Nueva Esparta han manifestado su preocupación por las constantes fallas en los servicios públicos, lo que impacta su calidad de vida y economía. Desde prolongados ciclos de escasez de agua hasta calles en mal estado y postes eléctricos a punto de colapsar, los problemas se repiten en varias comunidades.
Ángela Hernández, vecina del sector La Aguada, expresó su malestar por la falta de alumbrado público y el pésimo estado de las vías. "No hay luz del parque para acá, eso está oscuro. Los camiones pasan por allí, los de roca, y las calles están malísimas. El agua llega cada un mes", denunció.
En Palo Sano, La Asunción, Ismary Vásquez relató que el suministro de agua es irregular y puede tardar hasta 50 días en llegar. "Tengo que comprar un tanque de agua una vez al mes para solucionar. Son 20 dólares que afectan mi economía", explicó. La situación obliga a los residentes a incurrir en gastos extras para cubrir necesidades básicas.
Neibis Rangel, habitante del sector Táchira en Porlamar, alertó sobre un poste de electricidad en peligro de desplomarse. "Hemos metido varios reclamos porque ya se cayó uno. Pasa cerca de un colegio y es preocupante, pero Corpoelec (Corporación Eléctrica Nacional) no ha solucionado el problema".
La comunidad del sector Táchira teme por la seguridad de los niños y transeúntes que pasan por esta zona a diario.
Hasta ahora, las autoridades de la Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe) y Corpoelec no han emitido respuestas concretas ante estos reclamos, mientras los vecinos exigen soluciones urgentes para mejorar los servicios en la región.
Nueva Esparta / Mario Guillén Montero