“Los partidos se han convertido en clubes, franquicias o logias”, advierte Luis Beltrán Franco, exdiputado de la Asamblea Nacional (AN) por más de 30 años y fundador e integrante del movimiento Venezuela Democrática Unidad (VDU).
El también abogado y ex militante de Acción Democrática (AD) propone la regeneración de los partidos tradicionales y los nuevos para que vuelvan a ser útiles a los ciudadanos y militantes, y cumplan su papel de establecer las relaciones de estos con el poder.
VDU -el cual no es un partido político-, tiene más de dos años de fundada y Beltrán Franco hace proselitismo junto con chavistas disidentes, como el exministro de Finanzas, Rodrigo Cabezas. A pesar de su corta vida, a la organización también la alcanzó la persecución política: uno de sus miembros, Eduardo Labrador, fue encarcelado en octubre del año pasado.
Cada vez que se llama a una elección en el país, se platea un ritornello dilemático: participar o no. La única excepción fueron los comicios presidenciales del pasado 28 de julio cuando cerca de 80% de antagonistas del gobierno -de acuerdo con las encuestas- se reunificaron y obtuvieron una victoria que no ha sido reconocida por el poder establecido.
Para este 25 de mayo, están convocados los comicios regionales y legislativos. La misma diatriba emergió desde antes del anuncio oficial. VDU decidió no llamar a participar en estos sufragios. “No soy abstencionista, ni golpista. Soy hijo del voto”, destaca a título personal Beltrán Franco. Sin embargo, explica que en este caso la excepción la hace porque “las elecciones no son transparentes”.
-La oposición que participará en los comicios del 25-M argumenta que preservar o ganar espacios en las regiones y en la AN es un “acto de resistencia”.
-Participar en estas elecciones no es un acto de resistencia. La única resistencia en Venezuela es reclamar de manera firme, democrática y en paz, el resultado electoral que de manera inequívoca eligió a Edmundo González Urrutia como nuevo presidente de Venezuela, con más de siete millones de votos. Las elecciones del 28-J se hicieron bajo los caprichos del Gobierno, la oposición participó, corrió todos los riesgos y ganó.
- ¿Qué proponen como alternativa a la abstención?
-La participación electoral siempre tiene que estar sujeta a la transparencia, mientras eso no ocurra los partidos y la sociedad civil tienen que seguir en la calle, en los espacios en paz y en tranquilidad. No puede ser delito en Venezuela expresar opinión y que uno, termine en la cárcel, hostigado o perseguido por expresar su punto de vista. Votamos por un acto de responsabilidad democrática y ciudadana. Desde 1936 hemos usado el sufragio como instrumento para resolver nuestras diferencias políticas.
-Sin partidos no hay democracia. ¿Cómo recuperarlos?
-Sin partidos hay democracia, pero es inestable. Los partidos en el mundo viven una crisis de legitimidad y de credibilidad. En Venezuela se necesita una regeneración democrática política que incluya que los partidos viejos se reconstituyan y que los nuevos adopten el respeto a las elecciones internas, a la rendición de cuentas y a la transparencia en las relaciones con los ciudadanos. Lo digo con ánimo constructivo, lo correcto es que hagan elecciones internas. Si revisan el liderazgo de los partidos, sin ánimo de ofender, Julio Borges tiene al frente del Primero Justicia (PJ) desde que se fundó. Henry Ramos agarró a AD, en 2002, y sigue ahí. VP ahora tiene a Freddy Superlano, pero siempre fue Leopoldo López.
- ¿Cómo unificar la oposición, incluyendo a la que no está en la Plataforma Unitaria?
- El tema de la unidad no puede ser un fetiche. Soy independiente, milité 40 años en AD y en 2000 me fui sin inconveniente, porque no estaba de acuerdo con la línea del partido. El que milita en un partido tiene que aceptar las directrices de su organización, sino no puede estar allí. La Plataforma Unitaria (PU) decidió por mayoría no participar en unas elecciones que considera contrarias a la ley. De diez partidos que militan en esa plataforma, decidieron participar: Un Nuevo Tiempo (UNT) y el Movimiento por Venezuela (MPV). No creo que la unidad se haya roto porque UNT y MPV hayan tomado un camino distinto, pero tampoco eso los hace a ellos unos apestosos. Es una decisión que tomaron de manera libre y hay que respetársela al igual que la de la PU.
-La AD, de Henry Ramos y PJ, de Julio Borges, han expulsado militantes por no estar de acuerdo con las cúpulas. ¿Contribuyen a desmoronar esas organizaciones?
-Intento no inmiscuirme en los problemas de esos partidos. Lo lamento porque las divisiones no ayudan y crean desconfianza en la política y en los ciudadanos. Yo no le toco el rabo al perro que no conozco, esa es mi valoración de lo que pasa en PJ. Me gustaría que resuelvan sus diferencias, son partidos relevantes que están en una situación de complejidad por sus propios errores.
- ¿Cuál es su juicio de las facciones de AD que dirigen Henry Ramos Allup y Bernabé Gutiérrez, respectivamente?
- Yo milité 40 años en AD. Fui diputado por ese partido desde 1983 hasta enero del 2006. Hay que recordar que la judicialización de AD comenzó con Henry Ramos en 2001 cuando el TSJ le dio la legitimidad y falló en contra de Timoteo Zambrano, secretario general del partido. Me duele lo que pasa en AD, porque soy socialdemócrata. AD es un partido que ha sido clave en la historia y los venezolanos, no sé si de manera sentimental o por fetiche, siguen pensando que nada se puede resolver si AD no está presente. Deseo que resuelvan sus diferencias. Conozco a todos los dirigentes, a los que están al frente de esas facciones, les tengo cariño y respeto. En la pandemia, leí prácticamente, toda la obra de Rómulo Betancourt y me llamó la atención que tenía un libro del padre Arturo Sosa- Superior General de la Compañía de Jesús- sobre cómo se creó el PDN bajo la inspiración y el esfuerzo organizativo de Betancourt y ese legado vale la pena rescatarlo. Fue un partido creado con vocación venezolana y antiimperialista. Rescató el petróleo y el manejo de las materias primas. La historia se encargará de dar el veredicto sobre la vigencia de AD, pero debo decirlo con dolor: Es una caricatura, o como Carlos Andrés Pérez lo manifestó en una ocasión en un tono de despecho, es una especie de cascarón vacío.
- ¿Las otras toldas de oposición deben verse en el espejo de AD?
-Lo que digo de AD lo hago para las organizaciones políticas: deben revisarse, adecuarse y tener una hoja de ruta de compromiso con la democracia y con su futuro. Los partidos son una especie de papagayos sin cola, de bachacos sin antena, cada quien tiene una facción, negocia con quien tenga que hacerlo de acuerdo con la oportunidad y eso, no es favorable para los partidos, ni para los ciudadanos. Si está en el gobierno es Ejecutivo y si está, en la oposición, también pude ser gobierno desde los parlamentos, las gobernaciones, los concejos municipales y consejos legislativos. En gobernar un país los partidos tienen una corresponsabilidad, tanto cuando lo favorecen las urnas como cuando se pasan a la oposición.
- ¿El 9 y 10 de enero fue un fracaso la convocatoria a la “rebelión popular”?
-De ninguna manera, el 9 y el 10 de enero fueron un fracaso las convocatorias que se hicieron. Participé en Ciudad Bolívar en varias manifestaciones reclamando el respeto a la voluntad popular. Nunca me dijeron ni supe que eran actos para incendiar al país, porque de haberlo sabido los hubiese condenado y no hubiese participado. En Guayana, donde vivo, participamos de manera pacífica con vigilancia de los organismos de seguridad del Estado y no hubo inconveniente. Los venezolanos tenemos derecho a reclamar el respeto a la soberanía popular. El Gobierno y los organismos de seguridad tienen la obligación de garantizar la tranquilidad y la paz de quienes salimos pacíficamente a protestar. En la oposición democrática no hay vocación de violencia. Fuimos a unas elecciones pacíficas el 28-J, tan pacíficas que es la única vez que tengo un conocimiento, y tengo más de 50 años en la política y más de 72 años de edad, que vi a ciudadanos el día anterior haciendo cola para votar. Todos sabemos cuál fue el resultado, de manera que no comparto la visión de que eso fue un fracaso. Fue un acto de ejercicio democrático, del derecho a la protesta como lo establece la Constitución. Reclamamos el respeto a la soberanía popular expresada de manera libérrima en las elecciones del 28-J: elegimos a Edmundo González como presidente de la República.
-El llamado a la Fuerza Armada Nacional a actuar ¿significa que los civiles no tienen fuerza para imponer un cambio?
- De acuerdo con la Constitución, las Fanb son garantes de la paz interna del territorio y son custodias de las armas de la República. No pueden estar al servicio de ninguna parcialidad política y ejercen el derecho al voto como lo garantiza la Constitución y las leyes electorales. Tampoco es un delito que se le pida a las Fanb, que vieron el proceso electoral y sin que sean garantes de nada, que, si pudieran ayudar al restablecimiento de la convivencia y de la concordia en Venezuela, lo hicieran. No puede ser un delito que un venezolano o un partido o un grupo de ciudadanos le dirija de manera respetuosa una carta a las Fanb. Los venezolanos de a pie, no tenemos las armas, no andamos buscando golpes de Estado y las Fanb deben responder de manera constitucional a su mandato y a su compromiso.
- ¿Cuáles son las estrategias para incluir a los oficialistas, que sienten que perderán sus pocos beneficios laborales y sociales?
- ¿Qué beneficios? Los únicos incentivos que se le pueden dar a los venezolanos, es empleos, salarios y pensiones dignas. Que no tengamos esa inflación que nos condena a la pobreza. Que tengamos un país de pleno empleo, competitivo y que el petróleo esté al servicio de las grandes transformaciones de Venezuela. ¿Quién puede amenazar a un chavista diciéndole que se le va a quitar una vivienda? Ni siquiera la propiedad la tiene, ¿Cómo se puede amenazar a un chavista con quitarle la pensión? Es de 2 dólares. Ni siquiera con la bolsita (Clap) esa que dan. Lo que se le debe proponer al chavismo es la alternabilidad democrática que implica respeto al resultado de la sabiduría popular y que, así como ellos han gobernado 25 años, el 28-J hubo un cambio en la voluntad de los venezolanos eso debe respetarse. La garantía que hay que darle al Psuv y a sus dirigentes es que en la nueva democracia tendrán todas las garantías de la Constitución, para que sigan haciendo política como oposición, para que sean útiles a la sociedad y para que trabajen. Y ¿por qué no de un regreso al poder? Cuando tu pierdes una elección no pierdes la posibilidad de recuperarte en el futuro. Rafael Caldera fue candidato cinco veces y fue dos veces presidente de la República.
- ¿Está de acuerdo con la imposición de más sanciones para el país y los representantes gubernamentales?
-Nunca he pedido sanciones contra Venezuela ni contra los funcionarios. Ahora, si lo tomó un gobierno determinado, de manera soberana, lo que toca es respetarlas. Tampoco pido que las quiten, porque yo no tengo velas en ese entierro.
-¿Qué hay que esperar de la comunidad internacional?
-Espero que respalde a la democracia venezolana, que nos ayuden a consolidar un sistema democrático estable, competitivo que responda al interés de los ciudadanos. Lo correcto, es que el mundo democrático se preocupe por una de las democracias más sólidas que tuvo el país durante 40 años y que en 1998, los ciudadanos eligieron a Hugo Chávez de manera libérrima. Lo que necesitamos es solidaridad, apoyo, condescendencia, entender nuestra crisis política y meter la mano sin injerencia para que los venezolanos podamos resolver entre nosotros los problemas que nos aquejan. Estoy satisfecho como el mundo democrático ha respaldado a la oposición democrática y todos los intentos que se han hecho para llegar a un acuerdo, entre ellos, el de Barbados y el de Doha, que el Gobierno no cumplió.
Caracas / Ascensión Reyes R
