Campo Ajuro en la parroquia Santa Catalina de Carúpano, es uno de los barrios más viejos del municipio Bermúdez, con más de 100 años de existencia según sus habitantes. También es uno de los más céntricos, ubicado frente al mercado municipal.
Sin embargo, estas condiciones no lo salvan de padecer deficiencias en los servicios públicos, a los cuales sus vecinos reclaman soluciones. Los más graves, reseñaron, son las deficiencias con la electrificación y los derrames de aguas negras.
Luis López, vocero de la estructura vecinal de la zona, explicó que en Campo Ajuro, vecindad dividida por dos sectores, Bella Vista y la zona principal, y con unos 920 habitantes, padece a diario con los ríos de cloacas en sus calles, y a estos se agrega el deterioro del alumbrado público y de la estructura eléctrica en general.
López señaló que han tratado de atender algunas necesidades comprando bombillos, pero la comunidad está llena de problemas, al punto que cae una lluvia y caen las guayas.
En la parte alta, denunció, tienen esperando dos meses porque Corpoelec vaya a recoger una línea que permanece activa en plena vía.
Agregó recibieron dos postes por parte de la Alcaldía de Bermúdez para resolver parte de las necesidades.
A la voz de López se unió la de Zoraima Guevara, quien mencionó la necesidad de reparar la red de aguas servidas, repotenciar el alumbrado y agregó la importancia de que terminen de reparar la pasarela que conduce a este sector.
De acuerdo a la explicación de los vecinos, la estructura recibió mantenimiento con cinco galones de fondo anticorrosivo, por parte de la alcaldía, pero se quejaron de que dos motorizados de la Guardia Nacional bajaron por la estructura y rompieron los escalones.
Frente a su casa, el vecino Eloy Brito, señaló que debido a las deficiencias del sistema eléctrico, se quedan sin servicio a cada rato.
Ante panorama, dijo, se dañan los electrodomésticos, y no pueden reponerlos debido a que no cuentan con recursos. “Dígame yo que no trabajo y lo que soy es jubilado”.
Bermúdez / Cecilia Lárez
