El obrero Asunción Celestino Guaita Paraqueimo, de 75 años, murió supuestamente ahogado al caer desde un puente en el río Unare, en la carretera de Clarines, municipio Ezequiel Bruzual.
El septuagenario estaba desaparecido desde el pasado martes 27. Ese día su nieto Carlos Martínez, un mototaxista de 32 años, lo vio a las 12:00 del mediodía en las orillas del viaducto.
Se presume que Asunción, quien padecía de catarata, cayó accidentalmente en el afluente.
En vista de que el anciano no regresó a su domicilio, ubicado en la calle 1 del barrio El Paraíso, el ama de casa Irma Guaita y la luchadora social Omaira Guaita notificaron la desaparición de su padre ante el Centro de Coordinación Policial (CCP) de la Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui) y otras instituciones de la localidad.
Las hermanas Guaita afirmaron que los entes no les prestaron apoyo. Por ello, el veinteañero Héctor Guaita pidió una lancha prestada a un amigo para buscar a su abuelo Asunción Guaita.
El hallazgo
El joven navegó en el río Unare desde las 6:00 am. La búsqueda terminó a las 5:00 pm del Jueves Santo cuando encontró el cadáver de su pariente en el afluente, a la altura del caserío Torocotón de la parroquia Clarines.
En el lugar se apersonaron oficiales de la subdelegación Puerto Píritu del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
La comisión hizo el levantamiento de los restos descompuestos que trasladaron a la morgue del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) en Barcelona.
Barcelona / Yraida Núñez
