La cena del 31 de diciembre es una de las más esperadas del año en muchos hogares del estado Anzoátegui y el país en general.
Algunos repiten el menú del 24, es decir, comen otra vez hallaca con sus respectivos acompañantes, mientras que otros acostumbran preparar alguna receta especial, como pasticho o pollo horneado, entre otras.
Lo que sí es característico en la mayoría de las mesas es la presencia de uvas (12 para cada integrante para pedir 12 deseos), una botella de champaña y jamón ahumado para picar mientras llega el Año Nuevo.
No obstante, esta es una de las tantas tradiciones que se han ausentado de muchos hogares en los últimos tiempos, debido a los altos precios que poseen estos productos típicos de la temporada decembrina.
Y al parecer este año no cambiará mucho la situación, pues en un recorrido hecho por comercios y supermercados de la zona norte del estado Anzoátegui se observó que los costos de estos rubros no están al alcance de todos los bolsillos.
En el caso del vino espumante o champaña, los precios son variados según la marca.
Las botellas más económicas oscilan entre 4 y 8 dólares, no obstante, hay unas que pueden costar entre 11 y 17 dólares o su equivalente en bolívares.
Hay vinos de sabores de frutas, los cuales también son utilizados por la ciudadanía para brindar en la noche de Año Nuevo, que oscilan entre $4,50 y $6,50.
Mientras que el kilo de uvas nacionales se consigue en 8 y 9 dólares (las importadas salen en $12,6). Sin embargo, en los supermercados ofrecen pequeñas bandejas de 400 y 500 gramos que oscilan entre 3 y 4 dólares.
Estas son una alternativa más accesible para quienes desean cumplir con la tradición de los 12 deseos.
Hace unos años, muchas personas acostumbraban tener manzanas en sus mesas en la cena de fin de año, pero con el paso del tiempo y la situación económica del país esto fue quedando en el olvido. En la actualidad una manzana es ofrecida entre 0,90 y 1,10 dólares, mientras que el kilo cuesta hasta 4,95 dólares.
Pese a eso, hay quienes buscan otras frutas para seguir con esta costumbre que ha pasado de generación en generación.
"Yo he visto que hay bandejitas de uvas, quizás no compre un kilo, pero sí algunas. Una vez en mi casa repartimos tres uvas por persona, porque no alcanzaba para 12. Después de comprar los ingredientes para las hallacas, si no hay más plata tocará comprar mandarinas, que también las hemos usado para pedir los 12 deseos el 31 de diciembre", comentó la docente Sandra Prada.
En lo que respecta al jamón ahumado, este es uno de los alimentos que se ha ausentado de más hogares en los últimos años debido a sus altos costos.
Y es que hoy en día, uno de estos productos, tipo tender, oscila entre 10 y 20 dólares, lo cual equivale al valor de un jean o incluso unos zapatos deportivos económicos.
"Yo tengo años que no compro ni jamón ni champaña y como ahora eso no lo regalan en muchos trabajos como antes, entonces ya tenemos varios años que no comemos eso en la casa. Este año de broma y compraremos refresco para acompañar la cena, porque ni un vino, ya que están muy caros y prefiero invertir lo que reuní en ropa para mis dos hijos para que estrenen el 24 y 31", expresó la enfermera Aurimar Mendoza.
Otro producto que en la actualidad es complicado verlo en las mesas anzoatiguenses es el tradicional panetón.
Actualmente el de 400 o 500 gramos oscila entre 5 y 6 dólares, mientras que el de 750 gr puede costar entre $7 y $10.
En algunos establecimientos comerciales también hay presentaciones de 100 gramos, una especie de mini panetón, que tienen un valor promedio de 2,80 dólares.
Hace unos años este producto no faltaba en la mayoría de los hogares y mucho menos en los comerciales de Navidad transmitidos a través de la televisión, no obstante, esta realidad ha cambiado producto del bajo poder adquisitivo que poseen los venezolanos en la actualidad.
Ni hablar de las nueces que ya casi ni se observan en muchos comercios. En los pocos supermercados que se notó la presencia de éstos su valor va desde 15 hasta 18 dólares el kilo. Las bandejas por gramos varían entre 2 y 3 dólares.
Además de la champaña, en Navidad las familias suelen disfrutar de un buen ponche crema, bien sea hecho en casa o comprado.
En licorerías y supermercados la botella de esta bebida tiene un precio que varía entre $12,50 y $13.
Las botellas de whisky oscilan entre 18 y 28 dólares, las más económicas, mientras que las de sangría varían entre 4,90 y 5,90 dólares.
Una cerveza cuesta entre 0,90 y $1, mientras que un pack de cuatro unidades de lata oscila entre 4 y 5 dólares, dependiendo de la marca.
El refresco, una de las bebidas más buscadas para los menores de edad el 31 de diciembre, tiene precios variados, según la presentación.
Por ejemplo, el de un litro se puede conseguir hasta en 1,30 dólares en supermercados de la zona; mientras que el de litro y medio oscila entre $1,40 y $1,80. El envase de dos litros varía entre $2 y $2,50.
El equipo de El Tiempo realizó una encuesta a 15 personas para constatar cuáles de estos productos antes mencionado comprarán para disfrutar el último día el año y todos coincidieron en que no podrán adquirir la lista completa.
Algunos señalaron que harán lo posible por comprar al menos el vino espumante y las uvas, mientras que otros expresaron que nada más se enfocarán en tener al menos un refresco.
"Este año sólo compraremos lo básico para la comida navideña, porque entra dentro del presupuesto. Hay muchos gastos y la economía no está como para inventar. Las uvas se hayan ultra caras y las nueces también. Tal vez compremos un vino o ponche crema para compartir".
Adrián Vargas
Barbero
"En mi casa no acostumbramos a comprar panetón. Las uvas y el vino sí compramos, pero este año la cosa está difícil, yo creo que sólo nos dará para uno o dos refrescos y las uvas ya tenemos tiempo cambiándolas por mandarinas que son más baratas", comentó la ingeniero industrial Claudia Núñez, quien habita en Tronconal III.
Su colega, María José Patiño, aseguró que de los productos antes mencionados comprará sólo panetón, refrescos y unas galletas de Navidad, "porque es lo más accesible".
Mientras que el vendedor Gabriel Mosqueda explicó que, por los altos costos, no podrá adquirir la mayoría de los rubros que son tradicionales en la noche de Año Nuevo.
"De broma haremos hallacas y ensalada, y como siempre compraremos refresco para los chamos, pero las uvas y la champaña es un lujo", concluyó.
Puerto La Cruz / Jesús Bermúdez Pino
