El traslado de reclusos desde el Centro Penitenciario José Antonio Anzoátegui que se registró la mañana de este viernes 27 de septiembre, tomó por sorpresa a familiares.
Cabe recordar que, según el Foro Penal, se trata de 103 detenidos, principalmente jóvenes, que supuestamente participaron en las protestas opositoras realizadas luego de la elección presidencial del 28 de julio y en la cual el Consejo Nacional Electoral proclamó como ganador a Nicolás Maduro.
Varios de los parientes, que por temor no quisieron revelar su identidad, indicaron que se disponían a llevarles algunas cosas para el fin de semana cuando se encontraron con que estaban en pleno proceso para iniciar la movilización.
Indicaron que, una vez en el sitio, no les quedó de otra que ver cómo se los llevaban en varios buses. Y aunque pidieron información sobre el destino del traslado en el centro penitenciario conocido como Puente Ayala, solo les asomaron la posibilidad de que fueran llevados a la cárcel de Yare III, en el estado Miranda.
Los familiares, principalmente madres, consideran todo el proceso como una injusticia, pues, según afirman, no les han respetado los derechos a los detenidos.
"Esto es demasiada injusticia. No sabemos nada de ellos y no hicieron nada para estar ahí. No son unos delincuentes", expresó una de las madres, cuyo hijo de 21 años es uno de los privados de libertad.
Otra aseguró que el menor de sus hijos ni siquiera participó en las protestas, sino que estaba esperando un taxi junto con un amigo cuando fue capturado.
"Yo no soy una mamá alcahueta, soy justa. Donde tenga que alzar la voz y con quien tenga que hablar para pedir la libertad de mi hijo lo voy a hacer", insistió la señora, que vive en otro estado pero lleva un par de meses en Barcelona por toda esta situación.
Muchas de las mujeres estuvieron un buen rato en el Palacio de Justicia de la capital anzoatiguense solicitando información sobre el traslado, pero, según dijeron, allí les aseguraron que tampoco sabían nada.
Barcelona / Redacción Web