El sonido de unas detonaciones en el sector Campo Rojo de Anaco alarmaron a los residentes del lugar, que observaron a oficiales de la Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui) presuntamente intercambiando disparos con dos hombres en las instalaciones del patio de tanque de Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (Pdvsa).
Durante la balacera, que se habría registrado pasadas las 6:00 de la tarde del martes, murieron dos personas, una de ellas un adolescente de 16 años.
El adulto fue identificado como Carlos José Gómez Cordero (23), quien dejó una hija de un año de edad.I
Ambos cadáveres fueron ingresados en la morgue del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) para las experticias legales.
Desmienten la versión policial
Carlos José Gómez Centeno, padre de Gómez Cordero, aseguró que su hijo no era delincuente y no tenía prontuario. Hacía tres meses que se había retirado de la Policía Municipal de Freites, donde era oficial. Era el mayor de cuatro hermanos y estaba desempleado.
Pero según la versión ofrecida por funcionarios estadales de manera extraoficial, un taxista denunció en el comando que dos jóvenes y una mujer lo habían secuestrado y despojado de su carro Fiesta Power, color negro.
Indicaron que una comisión salió a patrullar la zona y en Campo Rojo observaron el vehículo con las características dadas por el trabajador del volante.
Al darles la voz de alto, señalaron las fuentes, el adulto y el menor de edad se bajaron del automóvil y dispararon contra los agentes. En la balacera resultaron heridos. La mujer logró escapar, mientras los jóvenes fueron llevados a la Clínica Industrial de Pdvsa en Anaco, donde murieron a los pocos minutos de su ingreso.
Dijeron que en el lugar del tiroteo los oficiales recolectaron dos escopetas cañón corto, calibres 12 y 16. Del procedimiento fue notificado el Ministerio Público (MP).
