Anteriormente era común ver a muchas personas desayunando en panaderías, fuentes de soda o en algún establecimiento antes de ir a trabajar.
No obstante, esto ha venido quedando en el olvido con el pasar de los años, debido a la alta inflación que atraviesa el país.
Y no es para menos, solo basta con visitar algunos comercios o preguntar en uno que otro puesto informal de venta de desayunos para corroborar que los precios no son del todo accesibles.
Por ejemplo, el costo de un cachito (solo de jamón) en panaderías ubicadas en Puerto La Cruz oscila entre 1,5 y 2 dólares, mientras que un pastelito de hojaldre es ofrecido entre $1 y $3, dependiendo del sabor.
En el caso de los populares mini lunch el costo promedio es de 1,70 dólares. El café, dependiendo del lugar, es expendido entre 0,50 y $1.
Estos precios ponen a pensar a más de uno y más teniendo en cuenta que con 1 dólar, por ejemplo, se puede adquirir un kilo de harina de maíz, con el cual se pueden preparar unas 20 arepas, aproximadamente.
"Yo tengo tiempo que no como en una panadería porque los precios son muy elevados y el sueldo no da para eso", comentó el señor Ronald Aguilar.
Otros costos
Otra de las alternativas para desayunar son los puestos de comida rápida.
Aun cuando estos ofrecen alimentos para desayunar más económicos, de igual forma representan un gasto considerable.
Tras hacer un recorrido por varios de estos sitios se pudo comprobar que una empanada cuesta entre 4 y 8 bolívares dependiendo del relleno. Esto equivale a entre 0,80 y 1,70 dólares aproximadamente.
Los tequeños, uno de los preferidos de los consumidores, tienen un precio que oscila entre 2 y 3 bolívares. Por ser el alimento más económico, este es uno de los escogidos por varias personas para desayunar "de vez en cuando".
"Eso era antes que uno podía desayunar a cada rato en la calle. Ahorita mi esposo y yo lo hacemos una vez a la semana y si acaso", expresó la licenciada Gloria Carrasco.
Puerto La Cruz / Jesús Bermúdez