En junio de 2024, la tasa de inflación mensual en Venezuela se situó en 2,4%, mientras que las variaciones anualizadas y acumuladas alcanzaron 68% y 18,1%, respectivamente.
Los rubros que mostraron los mayores aumentos fueron servicios con 8%, comunicaciones 4,9%, equipamiento del hogar 3,7% y educación 3%, informó el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), una entidad independiente de análisis económico.
A nivel de detalles, el aseo urbano se incrementó 7,9%, la televisión por cable 7,1%, la telefonía móvil 6,3% y la telefonía fija 7,3%.
A nivel regional, en el Distrito Capital la inflación mensual fue 1,6%, en Anzoátegui 4,8%, Nueva Esparta 2,2% y en Zulia 2,7%.
Esta desaceleración de la inflación se explica por la apreciación nominal del bolívar respecto al dólar. Efectivamente, en junio la tasa de cambio disminuyó 0,25%. Igualmente influyó en este resultado la contención salarial que ha venido aplicando el gobierno.
Conviene mencionar que la tasa de inflación de 2,4% en junio fue significativamente mayor que la variación del tipo de cambio, mientras que, en términos anualizados, en junio el tipo de cambio se depreció 30%, mientras que la inflación en ese lapso totalizó 68%
Estos datos indican que la tasa de inflación doméstica es 2,7 veces mayor que la depreciación nominal del tipo de cambio, con lo cual el poder de compra interno del bolívar ha caído en tanto que su poder de compra externo ha aumentado.
Ello sugiere que está sucediendo un progresivo y notorio atraso del tipo de cambio real, que se está reflejando en una afectación de la producción local, la cual no puede competir con los bienes importados, abaratados por la política mantener cuasi fijo en tipo de cambio, en un contexto de alta inflación.
Barquisimeto / El Impulso