Para el economista José Guerra la fuga de capitales es financiada por el BCV al vender dólares baratos. Sostiene que el sector privado está debilitado y enmudecido, por lo que prefiere operar en la informalidad antes de ser esclavo del régimen. No ve una salida mientras se mantenga la revolución, ya que “quienes crearon la crisis no pueden solucionarla”.
–¿Qué ocasionó la súbita alza del dólar en Venezuela?
–La insistencia del BCV en aplicar una política imposible de ejecutar, como la de estabilizar el tipo de cambio. Para tratar de lograr eso, efectuó importantes intervenciones (inyección de divisas ala banca) a lo largo de lo que va de 2022 y se agotaron las reservas, hasta que explotó el tipo de cambio.
–Especialistas opinan que el aumento de los salarios ocasionó esta explosión…
–¡Para nada! Simplemente, el Banco Central hizo públicas las cifras de inflación correspondientes a los meses de junio y julio, y cuando la gente cayó en cuenta que la misma había subido 12 % y 8%, respectivamente, quiso salir de los bolívares y comenzó a comprar bienes y, si le sobraba, dólares. El público no es quien presiona el dólar sino el comerciante cuando vende, ya que acumula bolívares y comprende que si vende el inventario se queda sin él; luego, este comerciante compra dólares para reponer el inventario a futuro. Eso presionó al mercado y el anclaje del tipo de cambio se hizo insostenible. Aquí se repite la misma historia del viernes negro de 1983, la crisis de 1996, la del 2012 y 2014.
–¿Qué es hoy el BCV?
–El BCV no existe. Lo que queda es un edificio de 24 pisos sin vida. Es más, parte de la ruina se debe al BCV, que acabó con el bolívar.Mientras, la fuga de capitales es financiada por el instituto emisor al vender dólares baratos.
–¿Juega banca la banca venezolana?
–A través del Banco Central, Maduro se propuso minimizar la banca y lo logro.
–Con la entrega de tierras a iraníes, ¿vislumbra una República Islámica de Venezuela?
–Esto es la primera vez que ha pasado en Venezuela. Es un acto de colonialismo. Con Irán viene el Corán, con todo lo que ello implica.
–¿Los beneficiarios del Arco Minero?
–Las mafias del tráfico de oro y otros minerales.
–¿Los perjudicados?
–El país como un todo. El daño es incuantificable.
–¿De quién es el oro venezolano?
–Debería ser de todos los venezolanos. Pero en realidad no es así.
–¿Y Citgo?
–También debería ser de todos los venezolanos. Para mí, sin estar de acuerdo con las sanciones, si no fuese por la protección del gobierno de Estados Unidos, la empresa se hubiese perdido hace rato porque Maduro dejó de pagar la deuda en noviembre de 2017.
–¿Ha habido mejoría en la economía venezolana?
–Hay crecimiento, debido exclusivamente al aumento de la producción petrolera. Las otras actividades están muertas.
–Como lo afirmó Maduro, ¿pasará el petróleo a un segundo plano para dar paso a “la potencia agrícola”?
–Maduro en ese tema y en otros no sabe de lo que habla. No tiene nociones de economía.
–¿Sobrepasará la producción petrolera el millón de barriles diarios?
–Depende de qué año estamos hablando. Este 2022 es imposible, habría que aumentar 400 mil barriles diarios y ello no parece posible.
–¿Qué hay que hacer con Pdvsa?
–Sanearla; despartidizarla, sacando al Psuv de ella y que ningún partido la use como su caja chica.
–¿Ha adquirido rasgos oficialistas el sector privado?
–El sector privado está muy debilitado y algunos optaron por callar.
–¿Podrá el Estado-gobierno subsidiar a la empresa privada para cubrir un aumento salarial?
–No tiene con qué. El Estado venezolano está quebrado.
–¿Prefiere la clase obrera que la “burguesía” maneje las empresas?
–Las empresas tienen que manejarlas quienes saben de eso, no cualquier aventurero que salga de una reunión del Psuv. Ellos no son gerentes de empresas, son saqueadores de empresas.
–Junto con la diáspora, ¿huyen los capitales a lo más seguro?
–En Venezuela hay salidas de capitales financiadas por el BCV vendiendo dólares baratos.
–¿Qué es lo más seguro hoy?
–No hay nada seguro en Venezuela.
–De no haber ocurrido la pandemia, ¿cómo hubiera sido la dinámica económica?
–La pandemia agudizó la crisis, pero no la creo. Sin dudas, estuviésemos algo mejor.
–¿Una referencia mundial con la crisis venezolana?
–Venezuela es un caso único. Mejor dicho, los gobiernos de Venezuela han despilfarrado la riqueza más grande del planeta.
–¿La verdad sobre el crecimiento del PIB para este año?
–Creo que hay crecimiento. Estábamos en el sótano menos veinte y ahora estamos en el sótano menos 10.
–¿Favoreció al proceso el Covid-19?
–En cierta medida si porque contribuyó a la desmovilización social y política por el miedo a contagiarse.
–¿Afecta a Venezuela el embargo petrolero de la UE a Rusia?
–Sí, porque Rusia busca mercados y se los puede quitar a Venezuela.
–¿Quién sustituirá el personal de la administración pública que, ante las bajas condiciones, está abandonando sus puestos de trabajo?
–No hay como hacerlo. Lamentablemente.
–¿Prefiere el venezolano laborar en la informalidad? 53% de la actividad empresarial asume actualmente esa modalidad.
–Si claro, antes de ser esclavo del Gobierno.
–¿Es el sector comercio el único que registra crecimiento?
–Sí, y también el petrolero porque viene de muy abajo.
–¿Ha mejorado la capacidad de compra del venezolano?
–Para nada. Los salarios de cuatro millones y medio de pensionados y empleados públicos son miserables. Casi $15 dólares al mes.
–¿Necesariamente hay que aumentar los salarios para impulsar el consumo?
–Sin ninguna duda. El problema es hacerlo sin generar inflación. Si no quedamos en lo mismo.
–¿Cómo controlar la inflación en Venezuela?
–Simple. Que le BCV no financie el déficit del Gobierno emitiendo dinero. Esa es una lección universal.
–¿El exabrupto económico?
–El modelo económico del socialismo del siglo XXI. No tiene ni pie ni cabeza.
–¿Las reformas necesarias para mejorar la economía?
–Cambiar de Gobierno es lo principal. Después un programa para reducir el financiamiento del BCV al Gobierno y estabilidad de la moneda.
–¿Las trabas para atraer la inversión nacional y extranjera?
–Que en Venezuela no hay Estado de derecho.
–¿Prometen las llamadas Zonas Económicas Especiales?
–Ya veremos. Hablamos en un año a ver si se ha instalado una.
–¿El misterio económico?
–Lo que está en la cabeza de Maduro. Es indescifrable. Es más bien un enigma.
–Al contrario de febrero de 1989, ¿por qué hoy no es inflamable la crisis del combustible?
–Buena pregunta. Creo que se descubrió que es preferible pagar caro a que ni exista el bien.
–¿Vislumbra una nueva reconversión monetaria?
–Por ahora no hace falta. Hay que ver cómo sigue la inflación.
–¿Conoce a alguien del oficialismo capaz de enderezar el rumbo económico?
–Esa persona no existe. Quienes crearon la crisis no pueden solucionarla.
–Y de la oposición, ¿a quién pondría en el timón?
–Hay muchos. Se trata de un equipo dirigido por un hombre que entienda bien los problemas del país y sus soluciones.
–¿Cuáles opositores en la actual AN no le siguen el juego al Psuv?
–No veo a ninguno haciendo oposición.
–¿Pondrá finalmente la Fanb orden constitucional?
–La Fanb tiene una gran deuda con Venezuela. Dejar ser el soporte de un régimen autoritario. Hoy la Fanb está muy desprestigiada.
–¿Podrá surgir del diálogo una receta para que la economía arranque como en los mejores tiempos?
–Acá no va a haber milagros. El dialogo es lo correcto, pero no esperemos mejoras importantes sin cambio político.
De perfil
José Guerra nació en Rio Caribe el 7 de septiembre de 1956. Es economista egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV), con especialización en el Economics Institute de la Universidad de Colorado y Maestría en la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign. Fue gerente de Investigaciones Económicas del Banco Central de Venezuela (BCV). Ejerce la docencia en la Escuela de Economía de la máxima casa de estudios. Es coautor de los trabajos que ganaron el Premio Nacional de Economía Ernesto Peltzer, otorgado por el BCV. Ha publicado, entre otros, los siguientes libros: Estudios sobre la inflación en Venezuela (BCV 2000), Temas de política cambiaria en Venezuela (BCV 2004) y La política económica en Venezuela 1999-2003, (UCV 2004). Es columnista en El Universal y del semanario Descifrado. Fue asesor de Henrique Capriles Radonski en las campañas presidenciales de 2012 y 2013. Integrante del Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF).
Caracas / Jolguer Rodríguez Costa
