Tres años cumplió esta semana la labor de cariño hacia los infantes más necesitados que realiza Casa Blanca, Organización No Gubernamental (ONG) que centra sus objetivos en la atención a niños en extrema necesidad de entre 3 y 10 años, de sectores como El Lirio, Cocolirio, Terrazas de la UDO y Guayacán de las Flores, en la parroquia Santa Catalina de Bermúdez en el estado Sucre.
Libny Montaño, directora de la institución, explicó que Casa Blanca es una fundación que busca atender a los niños que vienen de hogares con problemas sociales y económicos.
La activista dijo que hacen censos en las comunidades y detectan los casos, que luego son atendidos por el ente en áreas como la alimentación, la recreación, talleres de manualidades, reciclaje, clases de música, conservacionismo, higiene bucal y otras actividades.
Actualmente, tienen un cupo de 80 niños, que acuden a la casa, ubicada en Guayacán, en dos turnos diarios, porque la mayoría acude a sus escuelas a recibir educación formal.
“La extrema necesidad se traduce en abandono, niños que ni tienen su casa para comer, que eso lo estamos viendo todavía. Niños que en su casa no tenían el almuerzo, y si lo tenían, no tenían la cena, o si desayunaban no tenían más nada”.
La ONG recibe aportes de otras fundaciones como Amaia, Ávila Foundation y la Fundación Latinoamericana de Ayuda a Niños, Niñas y Madres Adolescentes (Flama). Esta última es la matriz del proyecto Casa Blanca.
En Casa Blanca hay cuatro maestras que imparten educación en valores, organizan tareas recreativas.
La institución es una especie de refugio, donde reciben un almuerzo nutritivo, con jugo y atención de lunes a viernes y aspiran ampliar el radio de acción hacia madres y adolescentes.
Carúpano / Cecilia Lárez