Pelícanos muertos en los alrededores del mercado Los Cocos de Puerto La Cruz encendieron las alarmas de los protectores ambientales que ya han realizado inspecciones en ese lugar.
Kathiuska Homsi, directora del Ministerio de Ecosocialismo (Minec) en el estado Anzoátegui, indicó que en atención a denuncias hechas por ciudadanos, acudieron al expendio de pescados para investigar las razones de la muerte de las aves marinas.
Durante la evaluación, en la que también participaron funcionarios del Instituto Nacional de Parques (Inparques), Cuerpo Civil de Guardaparques, Defensoría del Pueblo y la Alcaldía del municipio Sotillo, se hallaron unos 60 especímenes sin vida. Tenían fracturas en las alas, por lo que manejan la hipótesis de que los pescadores las golpean para ahuyentarlas y así evitar que “les roben la mercancía”.
Homsi consideró el hecho como un delito contra la fauna silvestre que puede merecer la aplicación de sanciones contra sus autores.
Indicó que el caso se encuentra en manos de la Fiscalía Ambiental número 21 y que no se puede dar a conocer el tipo de pena que procedería hasta que se demuestre culpabilidad.
Sin embargo, el artículo 478 del Código Penal de Venezuela establece que “el que sin necesidad haya matado un animal ajeno o le haya causado algún mal que lo inutilice, será penado con arresto de ocho a 45 días. Mientras que si los daños son ligeros podrán imponerse multas de hasta 150 unidades tributarias (150 U.T.)”.
Así mismo señala que no habrá sanciones para quien haya cometido el hecho contra esa clase de animales hallados dentro de su propio fundo, en el momento de causar algún estrago o perjuicio.
Por su parte, la Ley para la Protección de la Fauna Doméstica Libre y en Cautiverio menciona en su artículo 73 que las medidas por maltratar a un animal hasta causarle la muerte van desde el pago de 70 hasta 100 unidades tributarias.
Milena Pérez / Puerto La Cruz
