El caso de Rafael José Hernández Ramírez, de 31 años, quien ingresó muerto al hospital "Diego Carbonell" de Cariaco, municipio Ribero del estado Sucre, el pasado 5 de julio, al presentar traumatismos que causaron su deceso, dio un giro ante las denuncias de familiares, quienes afirman que el hombre fue sometido a torturas que le produjeron el deceso.
Según el reporte oficial, Hernández fue trasladado en mal estado desde la Dirección de Investigaciones Penales (DIP) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en Cariaco, donde permanecía detenido acusado de supuesto maltrato a una menor.
Sin embargo, las autoridades no aclararon las causas de los golpes y solo se dieron dos versiones: una de una caída, en la cual el hombre se golpeó la cabeza con una poceta y otra que daba cuenta de una golpiza por parte de otros detenidos.
A la fecha, familiares del fallecido piden investigar el deceso y denuncian supuestas torturas en los calabozos de la DIP.
Alicia Ramírez, madre del muerto, aclaró que su hijo estaba detenido injustanente, junto con su esposa, acusados de maltrato infantil, pero lo que ocurrió fue que a la suegra del joven se le cayó la hija de la pareja y recibió un golpe en la mano que le provocó una fractura.
Ramírez denunció que a su hijo "lo mataron a golpes, le reventaron las costillas, le metieron electricidad en la boca, él no maltrató a mi nieta, lo denunciaron en el hospital por la herida de la niña", aclaró.
Relató que un amigo de la familia reconoció el cadáver en la morgue del Hospital de Cariaco y les avisó. Ya tenía dos horas que había ingresado al centro asistencial. A varios días del hecho ningún funcionario de la DIP los ha contactado para darles una explicación.
La dama refirió las dos versiones que dan los funcionarios, sobre la muerte de su hijo: Una que lo mataron los presos y otra que se cayó en el baño, "pero esos golpes no fueron por una caída. Le reventaron las costillas. Pido justicia".
Por el caso, el diputado al Consejo Legislativo del estado Sucre (CLES) Miguel Vásquez, confirmó que luego de la necropsia de ley realizada en el cuerpo de Rafael José Hernández Ramírez, entre otras heridas, se evidenciaron "expresión de corriente en la boca. Algo abominable, una tortura", remarco el legislador.
Vásquez expresó que resulta inconcebible que Hernández Ramírez, quien "se encontraba en calidad de detenido por averiguaciones durante 48 horas, al tercer día aparezca muerto en los calabozos con politraumatismos generalizados, desprendimiento de rodilla, afección del tórax y expresión de corriente en la boca".
El legislador informó que está acompañando a los familiares para exigir que se inicien las averiguaciones del caso y se tomen los correctivos, "porque estás actuaciones de los cuerpos policiales no pueden repetirse".
Vásquez dijo que sólo hay un detenido por el caso. "Hacemos un llamado al gobernador, a los colegas de la Comisión Permanente de Política Interior (CPPI), porque este hecho debe discutirse en plenaria del CLES, por la debida depuración de los cuerpos policiales".
Llamó al gobernador, a la Fiscalía, Defensoría del Pueblo y al Cuerpo de Investigaciones, Penales y Criminalística (CICPC), a sumarse a la causa de la familia para el esclarecimiento del caso y depurar los cuerpos policiales.
Cariaco / Cecilia Lárez
