"Todos los días se sienten malos olores por esas aguas negras, pero cuando llueve esto se pone insoportable. No nos dan respuesta. Lo que dicen es que no se puede meter un vacum para allá, mientras seguimos esperando encerrados para no enfermarnos". Ese el testimonio de María Rodríguez, habitante del sector Orocopiche 1, en Santa Ana, quien al igual que el resto de los vecinos de ese urbanismo, sigue a la espera de que las autoridades municipales solucionen el desbordamiento de aguas servidas que los afecta desde septiembre de 2023.
El ama de casa reside junto a sus tres hijos menores en la calle 7, la más cercana a las alcantarillas y, por ende, en la zona abundan los olores putrefactos y los zancudos.
Erick Sarmiento, quien también habita en el urbanismo, relató que el mes pasado los vecinos redactaron una carta para plantear el problema ante la dirección de servicios públicos de la alcaldía de Santa Ana, pero la correspondencia no fue recibida por los funcionarios, quienes alegaron que darían una pronta solución.
"Aproximadamente en 15 días el personal de servicios públicos llevó un vacum a la urbanización Orocopiche 2. Dijeron que al terminar allí vendrían a hacer mantenimiento, pero hasta la fecha no han hecho nada", explicó Sarmiento.
El vecino Jaime Patete también está entre los que pide que atiendan la situación. "Siempre hay hedores porque la boca de visita está desbordada. Es importante que den respuesta porque ya llegó la temporada de lluvias", dijo.
Las familias se encuentran preocupadas porque los baños no funcionan correctamente y los desechos se devuelven. Esa situación representa un riesgo para la salud de niños y adultos.
Santa Ana / Danela Luces