Quienes residen en el sector Santa Rosa de Lechería todavía sufren las consecuencias del fenómeno de mar de fondo que se registra en la zona costera del estado Anzoátegui desde el pasado fin de semana.
En un par de casas las olas tumbaron paredes, mientras que en otras dejaron la estructura sentida, por lo que algunas familias están en condiciones de riesgo. Vecinos como Aída Figueroa expresaron su molestia porque el último gran susto lo vivieron cerca de la medianoche del lunes 6 de octubre y, pese a solicitar asistencia, ningún ente gubernamental se había acercado hasta el mediodía del martes 7.
Con algo de desesperación mezclada con resignación, habitantes de la zona iniciaron la labor de sacar el agua de sus hogares para intentar ordenar y finalmente descansar. Sin embargo, como el fenómeno ha bajado su intensidad pero no ha cesado, siguen en alerta ante la posibilidad de un nuevo oleaje fuerte.
Molestia
Aída Figueroa es sólo una de las tantas personas que viven en Santa Rosa que mostraron su molestia por la falta de atención por parte de las autoridades locales. La señora afirmó que por varias horas solicitaron asistencia de Protección Civil (PC), pero nadie se acercó al lugar.
"Hasta las 4:00 de la madrugada estuvimos llamando y nada. Lo único que preguntaban era si había heridos. Yo no creo que esa sea la única razón por la que ellos puedan atender a la gente en alguna emergencia", dijo la señora.
Otilia Salazar, cuyos hijos pescadores también se vieron afectados, dijo que en reiteradas oportunidades han solicitado sólo material para la construcción de un malecón que sirva como una primera barrera en situaciones similares, pero hasta ahora les han hecho caso omiso.
"Estamos acostumbrados al mar de fondo que normalmente es una vez al año y también a que los gobernantes no nos presten atención. Cuando vienen, lo que hacen es medio ver, intentan restringir el paso a algunas casas y que por prevención, pero no hacen más de eso", aseguró la adulta mayor.
Tanto Salazar como Figueroa coincidieron en que la alcaldía de Lechería y la gobernación del estado los tienen abandonados, lo que, a su juicio, queda en evidencia en situaciones de este tipo.
Ayuda
Ramón Sánchez acotó que a la medianoche del lunes 6 de octubre en su casa y en la de otros vecinos que también están a orillas del mar tuvieron que salir rápido con los niños hacia la calle Principal para poder colocarse en resguardo, pues las olas estaban fuertes.
Añadió que en su hogar hay dos paredes que están al borde del colapso ya que constantemente son golpeadas por el agua, razón por la que pide ayuda a las autoridades competentes.
Otra vecina que se identificó como Betsabé también solicitó asistencia de PC u otro cuerpo de seguridad, ya que en el patio de la vivienda de su mamá tienen problemas con la electricidad y temen que, combinado con la constante presencia de agua de los últimos días, se produzca algún accidente.
Sin trabajo
El mar de fondo no sólo ha perjudicado a quienes lidian con el agua en sus casas o a quienes les ha tumbado paredes, sino que también afecta a los pescadores de Santa Rosa, que no han podido salir a trabajar por las condiciones del mar.
"Así no pueden hacer nada porque es peligroso. Cuando empezó esto el fin de semana hubo un bote que se volteó con las olas, pero afortunadamente el percance no pasó a mayores. Por eso desde el sábado no sale nadie", comentó la esposa de un trabajador del mar, que se identificó como Yéssica.
Lechería / Javier A. Guaipo