De acuerdo con la la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi) 2023, presentada este 13 de marzo en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), 40 % de los niños, niñas y adolescentes (NNA) presentó una asistencia irregular en las escuelas del país, cerca de 2.6 millones de jóvenes entre 3 y 17 años, según las estimaciones estadísticas de la universidad.
Uno de los factores más influyentes que detectó la Encovi para las inasistencias escolares fueron las huelgas del personal docente para exigir el cumplimiento de sus derechos humanos y económicos, con un 30 % de las respuestas. Luego, se registra a las enfermedades que sufrieron los estudiantes como motivo de inasistencia prolongada (con 19 %), las inasistencias del propio docente ajenas a la protesta social (con 18 %) y la falta de alimentación de los estudiantes, tanto en el plantel educativo como en sus hogares (con 10 %).
La UCAB logró estos resultados después de aplicar la encuesta a más de 16.212 hogares venezolanos en más de 10 ciudades del país. Los datos de la muestra se tomaron entre mayo y junio del 2023, cuando el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social registró al menos 1048 protestas para la exigencia de un salario digno para los docentes y enfermeros.
Aún así, otro factor que influyó en la inasistencia escolar fue la falla de los servicios eléctricos en los planteles, llegando a ocupar hasta 7 % de las respuestas por los apagones eléctricos, 5 % por la falta de agua para consumir o ir al baño y 2 % la falta de gasolina y trasporte público.
Solo por la falta de servicios públicos, la UCAB estimó que los planteles públicos redujeron su calendario escolar a 2 o 3 días por semana.
La Encovi también arrojó que la población estudiantil que va a colegios privados se redujo casi dos tercios desde el 2015 por el aumento de la desigualdad de ingresos de los padres y su imposibilidad de pagar matrículas en planteles privados. Ahora el 88 % de los NNA en el país va a un plantel público.
La universidad reveló que la población venezolana ahora tiene un acceso menor a las zonas educativas, de tener unas respuestas del 41 % que afirmaban tener una guardería cercana al hogar en 2015 se redujo a 25 % para el 2023. El porcentaje de personas que decían tener un preescolar cerca de tu casa pasó del 69 % en 2015 a 62 % en 2023 y las respuestas con relación a las escuelas primarias se redujo del 74 al 62 % en el mismo periodo de 8 años.
Al mismo tiempo, la universidad destacó que la cobertura educativa mejoró 3 % con respecto al año anterior, llegando a cubrir el 66 % de la demanda potencial. Sin embargo, advierten que el nivel no llega a los datos registrados antes de la pandemia del covid-19, cuando había una cobertura del 70 % en los años 2019 y 2020.
El rezago escolar leve aumentó 11 % para los NNA del género masculino y 5 % para los NNA del género femenino comparado con el año pasado. Ahora 4 de cada 10 jóvenes, independientemente de su identidad de género, tiene una gran diferencia entre su edad y el límite de edad que el sistema educativo venezolano regula para la población.
«Esto revela la falta de continuidad en los itinerarios escolares asociada a problemas de ingreso tardío repitencia o deserción», agrega la UCAB.
Frente a la pregunta «¿Quién brinda acompañamiento pedagógico en el hogar?» el 71 % de los encuestados respondió que era la madre. Mientras que la figura paterna tuvo el 5 %, una cifra idéntica a la atención pedagógica por los hermanos mayores del NNA.
El 50 % de las madres encuestadas afirmaron que los problemas del servicio eléctrico y del internet restringen su labor de reforzamiento educativo, mientras que el 36 % dijo que necesitan más información por parte de las instituciones educativas para orientar en las tareas de sus hijos o representados.
Caracas / Runrunes