El ministro ecuatoriano del Interior, John Reimberg, informó sobre la detención de cuatro ciudadanos venezolanos, que supuestamente robaron un camión con cincuenta cilindros (pipas o bombonas) de gas de uso doméstico, con los que presume que iban a perpetrar atentados en el marco de las protestas indígenas contra el Gobierno.
En su cuenta de la red social X, Reimberg informó que la detención tuvo lugar el martes en la ciudad andina de Riobamba, en la provincia de Chimborazo.
Se trató de "4 venezolanos, que robaron un camión lleno con 50 tanques de gas y secuestraron a su conductor", indicó el funcionario.
"El gas, presumiblemente iba a ser utilizado para realizar atentados explosivos, en el contexto de las protestas. Estos delincuentes serán puestos a órdenes de la justicia para su debido proceso. La audiencia de formulación de cargos será hoy", añadió el jefe de la cartera del Interior.
Reimberg agregó que "no habrá impunidad para quien pretenda atentar contra el Estado, el orden y la seguridad" en Ecuador, donde -en otras ocasiones y otros contextos- se ha registrado el uso de cilindros de gas para perpetrar atentados.
El pasado miércoles, por ejemplo, estalló un vehículo en las afueras de una discoteca ubicada en el centro de la ciudad de Guayaquil. El automotor tenía tres cilindros (bombonas) de gas en su interior, y las autoridades investigan los móviles del suceso.
El pasado lunes, las autoridades detuvieron a dos ciudadanos venezolanos, presuntamente integrantes del la banda delincuencial transnacional Tren de Aragua, grupo originario de Venezuela, y al que el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, catalogó como "terrorista".
Esas detenciones tuvieron lugar en la ciudad de Otavalo, donde cientos de manifestantes atacaron un destacamento policial, destruyó sus instalaciones e incendió vehículos de la policía y otros particulares.
Noboa denunció en la víspera que los manifestantes en Otavalo intentaron derribar un helicóptero "lanzando voladores", ello en referencia a imágenes que circularon en redes sociales donde se aprecia cuando se trata de alcanzar a una de estas aeronaves con un proyectil lanzado desde una especie de bazuca artesanal.
La ministra de Gobierno, Zaida Rovira, calificó de "actos terroristas" a los ocurridos en Otavalo, adonde se trasladó este miércoles el jefe de Estado, quien estaba en Latacunga, capital de la provincia del Cotopaxi, sede temporal del Ejecutivo desde el pasado 12 de septiembre, cuando comenzaron las protestas por la eliminación del subsidio al diésel.
Tanto Cotopaxi, como Imbabura, son zonas de alta concentración de población indígena, donde se han registrado esporádicos cortes de vías en el marco de las protestas contra la eliminación del subsidio al diésel y otras decisiones del Gobierno.
Quito / EFE