El médico Javier Manrique, coordinador humanitario de Convite, dijo que debido al acceso limitado a los servicios de salud (consultas y medicamentos), la población adulta mayor en Venezuela vive con una serie de enfermedades crónicas sin el control adecuado.
Manrique agregó en entrevista en el programa En Este País, de Radio Fe y Alegría Noticias, que la falta de medicamentos está provocando enfermedades secundarias, incapacidad y hasta la muerte prematura.
“Esto está estrechamente vinculado al acceso a servicios públicos básicos como agua limpia y segura, y en la cantidad y calidad que se requiere. Asimismo, la electricidad, combustible y alimentación adecuada”, comentó.
El coordinador humanitario de Convite citó la última encuesta de condiciones de vida y de salud de la organización, en la que revelan que 90 % de los adultos mayores no cuentan con seguro que los respalde ante una emergencia, por lo que dependen de la red de salud pública.
Aunque no precisó porcentaje, Manrique destacó que la mayoría de los adultos mayores sobreviven únicamente de la pensión, la cual está asociada al salario mínimo (130 bolívares) lo que, según el especialista, se convierte en “una barrera para acceder a medicamentos y una buena alimentación”.
De acuerdo con el médico miembro de Convite, la dieta de los adultos mayores en Venezuela se basa principalmente en carbohidratos simples con una cantidad mínima de micronutrientes.
“La verdad es una dieta basada en azucares, harinas, granos, pasta y pan. Muy poco acceso a proteína animal, es decir, pollo, pescado y carnes. Esto provoca pérdida de masa muscular, producción de glóbulos rojos, albumina en la sangre, entre otros”, señaló.
“El impacto de la pandemia y la migración de familiares está pasando factura. No solamente a nivel de ingresos y nutricional, sino también a nivel de salud mental, provocando en el adulto mayor depresión y ansiedad”, indicó Manrique.
El miembro de Convite señaló que un significativo grupo de adultos mayores en Venezuela, alrededor de unos 500 mil, viven solos. Esta situación se ha generado en gran parte, debido a la migración masiva.
Por ello, Convite puso en marcha un programa de acompañamiento en el que pares voluntarios (adultos mayores) brindan compañía a otros y esto “contribuye a reducir esa sensación de aislamiento y soledad que muchos enfrentan en este momento”, según el especialista.
El año pasado murieron de forma violenta 300 personas mayores en Venezuela, según estudio realizado por Convite.
La investigación detalla que 124 de las víctimas fueron asesinadas durante la comisión de diversos hechos delictivos, entre ellos robos, venganza o sicariato.
Caracas / Radio Fe y Alegría