“Si en 2017 pasamos hambre, no me quiero ni imaginar cómo será este año si comenzamos con ese aumento que disparará aún más los precios”, sostuvo la secretaria Micaela Beltrán, al ser consultada sobre el incremento salarial de 40% que decretó el presidente Nicolás Maduro hace una semana, el cual pasó el sueldo de Bs 177 mil 507 a Bs 248 mil 510.
Al igual que Beltrán, otros usuarios del mercado municipal de Puerto La Cruz comentaron que esa medida, aplicada por quinta vez en el año 2017, no solventa la grave crisis inflacionaria que afecta la economía de los venezolanos, pues consideran que esas decisiones “alteran mucho más los costos de los productos y servicios”.
Y es que los 248 mil 510 bolívares, monto vigente desde el 1° de enero, “se hacen agua” en las manos de los anzoatiguenses al momento de realizar sus compras, pues, por ejemplo, este sábado, el kilo de pollo costaba hasta en Bs 150 mil en el expendio porteño.
“Una palomita de dos kilos son 300 mil bolívares, entonces que me digan ¿de qué sirvió ese aumento si igual el precio de toda la comida está por las nubes?”, se pregunto el taxista Diego Astudillo.
El comprador manifestó que para preparar un almuerzo para su familia, conformada por su esposa y dos hijos, gasta alrededor de Bs 500 mil en todos los productos.
“Si cocinamos medio pollo de ese, utilizamos un cuarto de kilo de arroz que se encuentra hasta en Bs 90 mil (en el mercado) y compramos un poquito de aliños podríamos gastar más de 450 mil bolívares”, explicó.
El precio de los vegetales en ese mercado varía dependiendo de la forma de pago, pues si es en efectivo se cancela a un costo menor, pero si se hace a través de puntos de venta puede hasta duplicarse.
El kilo de cebolla se puede encontrar desde Bs 70 mil hasta Bs 140 mil, el de ají desde s Bs 15 mil hasta 25 mil y el de monte (perejil, cilantro y cebollín) entre Bs 20 mil y hasta Bs 40 mil.
Astudillo aseguró que si ganara salario mínimo mensual no podría cubrir ese tipo de gastos en su hogar.
“Si estuviese trabajando para un 15 y un último me gastara esa quincena en medio cartón de huevos y eso es lo que mi familia tendría para comer por dos semanas”, manifestó el conductor.
Rechazo
El 31 de diciembre, cuando el Ejecutivo nacional informó sobre el aumento salarial, también notificó sobre el alza del bono de alimentación, el cual subió de 279 mil a 549 mil bolívares.
Pero este no fue el único anuncio, igualmente habló de una nueva modalidad para la cancelación de la cestaticket: a través de talonarios, como se hacía hasta el mes de abril de 2017.
Esta noticia generó malestar en los anzoatiguenses que rechazaron la medida por ser “tedioso” comprar con este método.
La portocruzana Virginia Mendoza señaló que teme que estos tickets no sean aceptados en los pequeños comercios de la zona norte.
“Si cuando usábamos eso el año pasado fue un problema para comprar en algunos locales, no me quiero ni imaginar ahora”, comentó.
Roza Carvajalino, otra de las encuestadas, indicó que actualmente “la mayoría” de los productos que consume los encuentra con los “bachaqueros” porque, según alegó, en los grandes supermercados los logra adquirir después de realizar largas filas.
“Yo trabajo y no puedo pasar tres o cuatro horas en una cola por eso me toca comprarlo bachaqueado y yo no creo que esa gente vaya a aceptar los tickets”, intuyó.
Puerto La Cruz / Alejandra Maigua