“Todo tiene su final, nada dura para siempre. Tenemos que recordar que no existe eternidad”, dice una canción interpretada por el salsero puertorriqueño Héctor Lavoe y se amolda perfectamente a lo que representará la Copa del Mundo Catar 2022 para dos leyendas vivientes: el argentino Lionel Messi y el portugués Cristiano Ronaldo.
Messi, futbolista del París Saint Germain (PSG) de Francia, y Ronaldo, perteneciente al Manchester United de Inglaterra, se erigieron como los mejores jugadores de las décadas de los 2000 y 2010. El primero tiene 35 años de edad y el segundo 37, razón por la que este quinto torneo universal representará su último “gran baile” a nivel de selecciones y, de paso, la oportunidad de levantar el trofeo más anhelado por cualquier atleta para cerrar con broche de oro sus brillantes carreras.
Tanto Messi como Ronaldo, que en el pasado protagonizaron una rivalidad deportiva especial cuando el gaucho pertenecía al FC Barcelona y el lusitano era ficha del Real Madrid CF que son los dos clubes más importantes de España, afrontarán su quinta Copa del Mundo y eso les permitirá igualar un récord que comparten otros cuatro deportistas.
Hasta Rusia 2018, una justa en la que Francia conquistó su segundo cetro, el portero mexicano Antonio Carvajal, el volante/zaguero alemán Lothar Matthaüs, el arquero italiano Gianluigi Buffon y el defensor azteca Rafael Márquez eran los únicos que intervinieron en cinco ediciones de la cita universal, pero ninguno de ellos tuvo la notoriedad de Messi y Ronaldo que por sus capacidades ofensivas se transformaron en los rostros del balompié en el siglo XXI.
Messi, nacido el 24 de junio de 1987 en Rosario, y Ronaldo, quien vio por primera vez 5 de febrero de 1985 en Funchal, despuntaron a nivel de clubes y buscan conquistar la Copa del Mundo, avalada por la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) para retribuir el cariño de sus aficionados.
Messi disputó 827 encuentros en contiendas de equipos rentados y acumuló 692 goles, además de 292 asistencias, una muestra de que no sólo es capaz de finalizar acciones de peligro, sino también de crear espacios para que sus compañeros puedan definir con tranquilidad.
Ronaldo, a quien los cronistas europeos catalogan como el mejor ariete de todas las épocas, acumuló 700 dianas y 211 pases para anotación en 945 compromisos con conjuntos profesionales.
Ambos ganaron múltiples ediciones de la Liga de Campeones de la UEFA, el evento más prestigioso del viejo continente en el que ocupan los primeros puestos de la tabla de artilleros.
Messi alzó “La Orejona” en cuatro ocasiones, todas con FC Barcelona, mientras que Ronaldo lo hizo en cinco oportunidades: una con Manchester United y cuatro con Real Madrid CF. El argentino suma 127 tantos en la competición continental y ocupa el segundo lugar histórico de una lista que el luso encabeza con 140 “gritos sagrados”.
A pesar de los excelentes números con sus cuadros, tanto Messi como Ronaldo no han podido tener la misma brillantez con Argentina y Portugal en las competiciones mundialistas.
Messi, poseedor de siete Balones de Oro otorgados por la revista France Football, solo movió las redes seis veces en 19 presentaciones en certámenes planetarios. Remeció en las mallas una vez en Alemania 2006, no lo hizo en Sudáfrica 2010, consiguió cuatro goles en Brasil 2014 y uno en Rusia 2018.
Son pocas dianas para alguien que con 90 esféricas “mandadas a guardar” es el máximo anotador de Argentina en todas las épocas. Disputó 164 compromisos con su selección.
Ronaldo, dueño de cinco Balones de Oro, tuvo un mejor desempeño que Messi en Mundiales, aunque sin llegar a ser extraordinario. Produjo siete “gritos sagrados” en 17 juegos con Portugal. En Alemania 2006 “facturó” un tanto, en Sudáfrica 2010 consiguió otro, en Brasil 2014 registró idéntica cantidad y en Rusia 2018 movió los guarales en cuatro ocasiones.
Con la oncena portuguesa intervino en 188 confrontaciones internacionales y produjo 117 goles, lo que representa un récord absoluto para cualquier atleta en todas las épocas.
Catar 2022 representará el último chance tanto para Messi como para Ronaldo de anexar el premio máximo a nivel de seleccionados a sus colecciones personales que ya incluyen galardones con sus tropas patrias.
Messi se erigió como el ganador de la medalla dorada con Argentina en los Juegos Olímpicos Pekín 2008, además de la Copa América Brasil 2021 y la Finalissima 2022. Ronaldo llevó a Portugal a consagrarse tanto en la Europcopa Francia 2016 y como en la Liga de Naciones de la UEFA en la temporada 2018-2019.
Tendrán la misión de llevar a sus elencos a la cima del planeta y en plena madurez futbolística uno de ellos podría materializar ese sueño en Asia, después de quedar cerca de conseguirlo en el pasado.
En Alemania 2006 Ronaldo integró a Portugal que, liderado por Luis Figo, alcanzó las semifinales y ocupó el cuarto peldaño de un torneo ganado por Italia. En Brasil 2014 Messi, como gran caudillo, guio a Argentina al duelo por el gallardete, en el que su agrupación perdió 1-0 con Alemania en tiempo extra.
Ahora, en vísperas de lo que será su último “gran baile”, la fanaticada del orbe espera que los Dioses del Fútbol les concedan un último deseo y les permita que Portugal y Argentina se midan en una Gran Final para observar un nuevo enfrentamiento entre Messi y Ronaldo que, sin importar lo que ocurra, ya tienen asegurados sus lugares en el Olimpo de los genios del balompié.
Valencia / Joseph Ñambre