Camboya confirmó el jueves su primera muerte por COVID-19 desde que comenzó la pandemia hace más de un año, mientras lucha contra un nuevo brote local que ha infectado a cientos de personas.
El hombre de 50 años fue confirmado infectado el mes pasado mientras trabajaba como conductor para una empresa china en la costa de Sihanoukville y murió en el hospital de la amistad jemer-soviética el jueves por la mañana, dijo el Ministerio de Salud en un comunicado.
Camboya ha confirmado solo 1.163 casos de infección por el coronavirus.
Según el Ministerio de Salud, el nuevo brote se remonta a un residente extranjero que rompió la cuarentena en un hotel y fue a un club nocturno a principios de febrero. Eso causó una gran cantidad de infecciones y llevó al gobierno el 20 de febrero a anunciar un cierre de dos semanas de todas las escuelas públicas, cines, bares y áreas de entretenimiento en Phnom Penh.
Desde entonces, el gobierno ha extendido los cierres por más de dos semanas para escuelas, gimnasios, salas de conciertos, museos y otros lugares de entretenimiento en Phnom Penh, la cercana provincia de Kandal y la provincia costera de Sihanoukville.
El jueves, el Ministerio de Salud dijo que se reportaron 39 casos de transmisión local.
A medida que crece el brote, un hotel de lujo desaparecido en la capital se ha convertido en un hospital de coronavirus de 500 habitaciones, y las autoridades están aplicando una nueva ley que impone sanciones penales por violar las normas de salud.
El país inició su campaña de vacunación en febrero con 600.000 dosis de la vacuna Sinopharm producida en China. También recibió 324.000 dosis de la vacuna AstraZeneca este mes que fueron donadas y producidas en India.
Camboya / AP
