Trae Young golpeó temprano a Filadelfia que tuvo a Hawks en control del Juego 1 y terminó la victoria con un globo a John Collins para un canasto con una mano.
Collins dio un puñetazo al aire en celebración, y Hawks se tomó un momento para exhalar después de que casi se desperdiciara una gran ventaja.
"Gracias a Dios estábamos 20 arriba", dijo el escolta de Hawks, Kevin Huerter.
Young anotó 25 de sus 35 puntos en la primera mitad cuando Atlanta se deshizo de Joel Embiid y una multitud hostil y aguantó para vencer a Sixers de Filadelfia 128-124 el domingo en su primer partido de semifinales de la Conferencia Este de la NBA.
"La confianza en todos estos muchachos es alta", dijo Young. "Estamos aquí jugando el uno para el otro. Aquí afuera divirtiéndose. Todo el mundo está encerrado".
Embiid levantó un mazo cuando regresaba de una ausencia de un juego con una rotura de cartílago en la rodilla derecha. Young y Hawks tenían a Sixers abajo en la cuenta desde el salto y lideraban por 26 puntos.
Sixers, jugando frente a su mayor multitud de la temporada con 18.624, se negó a ceder fácilmente la cancha de casa y Embiid anotó canastas consecutivas que los acercaron a tres con 1:01 por jugar.
Bogdan Bogdanovic, quien se perdió los tres choques de la serie de la temporada contra Sixers por una lesión en la rodilla, estabilizó a Hawks cuando enterró un triple que les dio el respiro que necesitaban.
Incluso se llevó los dedos a los labios y, por si acaso, hizo callar a la ruidosa multitud. "Es un fabricante de peces gordos", indicó Huerter.
Barcelona / José Barberi Jr.
