Los rebeldes en el este del Congo mataron al menos a 19 personas e incendiaron un centro de salud y casas, informaron las autoridades el domingo.
Hombres armados sospechosos de formar parte de las Fuerzas Democráticas Aliadas, una milicia con vínculos con el grupo Estado Islámico, atacaron a civiles en la ciudad de Kirindera, dijo Carly Nzanzu, exgobernadora de la provincia de Kivu del Norte, en una entrevista con medios estatales.
Los ataques de las ADF han matado a decenas de personas en varios pueblos de Kivu del Norte en los últimos días. Las autoridades del Congo dicen que las personas fueron masacradas con pistolas, cuchillos y machetes, indicó AP.
Aamaq, una agencia de noticias vinculada al grupo Estado Islámico, publicó un comunicado el sábado en el que el Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad de matar a más de 35 “cristianos” y herir a decenas en el este del Congo la semana pasada.
El conflicto ha estado latente durante décadas en el este del Congo, donde más de 120 grupos armados luchan por el poder, la influencia y los recursos, y algunos para proteger a sus comunidades. El ADF ha estado muy activo en la provincia de Kivu del Norte, pero recientemente amplió sus operaciones a la vecina provincia de Ituri.
Los esfuerzos para detener la violencia en contra han dado poco resultado. Una operación conjunta de casi un año por parte de los ejércitos de Uganda y el Congo no derrotó ni debilitó sustancialmente a las Fuerzas Democráticas Aliadas, concluyó un panel de expertos de la ONU en un informe de diciembre.
La ONU y grupos de derechos humanos han acusado a los rebeldes ADF de mutilar, violar y secuestrar a civiles, incluidos niños. A principios de este mes, Estados Unidos ofreció una recompensa de hasta 5 millones de dólares por información que pudiera conducir a la captura del líder del grupo, Seka Musa Baluku.
Congo / Con información AP