Pese a que recientemente se realizó una jornada de descongestionamiento en los calabozos de la Policía Municipal de Sotillo (Polisotillo), estos continúan hacinados pues unos trescientos detenidos aún esperan que sus causas sigan su proceso sin dilación en los tribunales de control, juicio y ejecución de Barcelona, y se les otorgue las medidas cautelares para enfrentar el proceso en libertad.
Pero no sólo en los calabozos de Polisotillo se vive el drama del hacinamiento, también lo están padeciendo la Policía Municipal de Simón Bolívar (Polibolívar), Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui), Policía Nacional Bolivariana (PNB), Servicio Bolivariano de Inteligencia nacional (Sebin), Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y en las distintas delegaciones municipales del Cuerpos de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), de la zona norte del estado, en donde no caben más presos.
Se supo que estos recintos estarían albergando más de dos mil presos, cifra que aumenta cada día.
Manolo Pérez, residenciado en Barcelona, contó que tiene un sobrino detenido desde hace un año y sólo lo han llevado a los tribunales dos veces, por lo que no se explica por qué tanto retraso.
Puerto La Cruz / Eleida Briceño