La rehabilitación integral de la avenida Las Palmeras es una de las principales peticiones que le hacen los habitantes del sector Guamachito, en Barcelona, a las autoridades competentes, para así poder mejorar su calidad de vida.
Y es que esta vía tiene el asfalto desgastado en varios tramos y deterioradas algunas alcantarillas y bateas.
"Esta es una de las principales vías que tiene Guamachito y se ha ido dañando con el tiempo, porque la última vez que la pavimentaron fue hace como 30 años", expresó el vecino Giuvuin Blanco.
Blanco también pidió que solucionen el problema de las aguas negras, pues a raíz de las constantes fallas en el sistema de bombeo, los líquidos putrefactos se desbordan en algunas viviendas.
"Cuando deja de funcionar esa bomba, el agua busca por dónde salir y eso ha reventado las tuberías de algunas casas. Aquí tuvimos que abrir una canal adentro para que desahogara", relató Blanco, mientras mostraba cómo las cloacas corrían dentro de su vivienda.
Por otro lado, Emma Pericana exhortó a las autoridades para que le realicen mantenimiento constante al arroyo que pasa por la comunidad, para evitar su colapso.
"Esa maleza crece muy rápido y siempre deben limpiarlo. Este año, gracias a Dios, no nos afectamos mucho pero todos los años se nos inunda la casa", contó Pericana.
La representante de la Unidad de Batalla Hugo Chávez (Ubch), Ninoska Gutiérrez, comentó que están trabajando, por medio de la selección de proyectos en la Consulta Nacional Pública, para priorizar la atención. Así que los vecinos este año han votado más por el embalse del arroyo, en el cual están trabajando para que tenga mejor desagüe.
Mencionó que en las próximas semanas se espera la realización de una nueva consulta nacional, por lo que tienen que postular siete proyectos para que resulte ganador uno y no descarta que en la lista esté la rehabilitación de la avenida.
Por otro lado, José Magallanes, también líder de la comunidad, solicitó que se poden algunos árboles grandes que se encuentran en la orilla del arroyo, los que a su juicio representan un peligro para los residentes.
Barcelona / Elisa Gómez