El Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar se inició la noche del domingo 25 de febrero en un marco emotivo tras los devastadores incendios que recientemente afectaron a la región chilena de Valparaíso. Un inicio sobrio y profundo, marcado por un momento de silencio en memoria de las personas que fallecieron debido a los incendios, fue inaugurado el festival.
El primer artista internacional en presentarse fue el español Alejandro Sanz. Luego de su función y tras las ovaciones del público, recibió dos Gaviotas, una de Plata y otra de Oro.
La jornada fue clausurada por el cantante colombiano Manuel Turizo, luego de las habituales presentaciones de la competencia internacional y de la competencia folclórica.
Durante seis noches consecutivas, el anfiteatro de la Quinta Vergara, el tradicional escenario de Viña del Mar, será testigo del desfile de artistas consagrados y de otros emergentes. Todos, decididos a satisfacer al "Monstruo", como se conoce al exigente -y a veces cruel- público de Viña del Mar, y también llevarse a casa una Gaviota, el trofeo del festival.
Alejandro Sanz, antes de presentarse, visitó una de las ‘zonas cero’ de los mortales incendios que causaron 133 muertos y arrasaron miles de casas en la región de Valparaíso. El español pidió «más manos» para ayudar en la reconstrucción.
El cantante, que volvió al Festival Internacional del Viña del Mar tras ocho años de ausencia, quiso desplazarse a Villa Independencia, uno de los cerros más afectados por las llamas. Ahí compartió tiempo, experiencias, sonrisas, emociones y abrazos con los voluntarios de una ‘olla común’, y les entregó ayuda.
Asimismo, Sanz instó al resto de estrellas internacionales que desde este 25 de febrero hasta el próximo viernes animarán la Quinta Vergara a que se sumen a «ayudar a este trabajo que todavía no termina».
Chile / Redacción web / Agencias