Familiares de una niña recién nacida prematura en el Hospital Universitario “Antonio Patricio de Alcalá” en Cumaná, protestaron a las puertas de esa institución, por la muerte de la pequeña, que afirman fue consecuencia de un apagón que afectó el centro de salud y que dejó inoperativos los equipos del área de prematuros, la semana pasada.
La abuela de la recién nacida, Ana Padilla, explicó que estaba cuidando a la niña desde el día 6 que ingresó, que nunca estuvo intubada y estaba mejorando.
La falla eléctrica se presentó a las 2:00 de la mañana del jueves y la luz nunca entró, la planta no funcionó. A un cuarto para la 6:00 de la mañana el doctor la llamó y le dijo que la niña necesitaba una manta térmica.
“Todo estaba apagado y mi nieta ya estaba moribunda, pidieron una manta térmica, pero el doctor dijo que no contaban con eso. Al rato ya estaba cadáver. El doctor me dijo que sufrió hipotermia”.
La afectada denunció que el director del hospital negó que la niña falleciera por la falla eléctrica. “Claro que sí porque la incubadora se enfrió, la niña sí era prematura, sí estaba baja de peso pero eso no significa que se murió de eso. Se murió por la falla eléctrica”.
Pidió justicia para su nieta. “No merecía morir de frío. Ahora sí aparecieron las mantas eléctricas y la planta para el tercer piso. Agradezco que hayan aparecido para que no haya más muertos”, enfatizó.
Bella Justiani, vocera del Movimiento Ni Una Más, que defiende los derechos de las mujeres, hizo un llamado al presidente Nicolás Maduro, a los organismos de defensa de los derechos humanos, para que se investigue la muerte de la recién nacida y la afectación a otro pequeño, por la falla eléctrica que se produjo el jueves 16 de junio.
Acusó al director del Sahuapa, William Meneses, de no querer asumir la responsabilidad de lo ocurrido con el apagón. “Dijo que la muerte fue porque son niños de siete meses, como si un niño en esta condición no tuviera derecho a la vida”.
Cumaná / Yumelys Díaz