Trabajadores que hacen vida en el Hospital Universitario Dr Luis Razetti de Barcelona denunciaron que la gerencia de jefatura del recinto pretende desmejorar sus condiciones laborales, a través de una serie de decisiones.
Gregorio Medina, delegado de prevención del nosocomio capitalino, aseguró que los patronos, supuestamente, quieren imponerles a los camilleros un nuevo sistema rotatorio de guardias, lo cual los cargaría aún más de trabajo teniendo en cuenta el déficit de personal que existe en la actualidad.
"Pretenden hacer esto a la brava sin medir ningún informe técnico, cuando los camilleros ya están asignados a los diferentes servicios del hospital y llevan años cumpliendo eficazmente con su labor en esos servicios", aseveró.
Esta situación provocó que también se pronunciará el coordinador general del Movimiento de Trabajadores de la Salud (Motrasalud), Edisson Hernández.
"No entendiendo por qué si alguien viene haciendo bien su trabajo, debe ser removido de su área", dijo.
A su juicio, esta rotación de las labores lo que busca es la imposición de nuevos jefes, lo cual, según afirmó, no resuelve los verdaderos problemas del centro de salud.
"El personal lo que requiere no son desmejoras para favorecer esos nuevos jefes, sino que se le mejore sus condiciones de trabajo, como por ejemplo los cuartos de descanso de los quirófanos, sala de parto y anexo pediátrico que se encuentran en condiciones infrahumanas desde hace más de 5 años. Aunado a esto, sigue presentándose la falta de equipos de bioseguridad. Lo que el personal aspira es que se les remunere como establece la Constitución con un salario digno y suficiente que les permita mantener a su núcleo familiar y que además se les dote de los equipos de bioseguridad que no tienen para cumplir con su trabajo sin exponer su vida y la de sus seres queridos", añadió.
Puerto La Cruz / Jesús Bermúdez
