Decenas de niños y maestros murieron después de que un expolicía irrumpiera en una guardería en el noreste de Tailandia. Hasta el momento fueron contabilizados 37 muertos en el que se considera el ataque "más mortífero en la historia del país".
Los testigos cuentan que el personal del jardín de niños cerró la puerta al ver como el agresor se acercaba con un arma, pero él comenzó a disparar y entró.
El portavoz de la policía, Archayon Kraithong, puntualizó que otras 12 personas se reportaron como heridas.
“La maestra que murió, tenía un niño en sus brazos. No pensé que mataría a los niños, pero disparó a la puerta y la atravesó”, precisó un testigo, de acuerdo a lo reseñado por AP.
Los informes de las autoridades precisaron que el hombre fue despedido a principios de este año a consecuencia de ser señalado por un delito de drogas. El agresor se quitó la vida después de matar a su esposa e hijo en casa.
Puerto La Cruz / Redacción web